This is default featured post 1 title

Go to Blogger edit html and find these sentences.Now replace these sentences with your own descriptions.

This is default featured post 2 title

Go to Blogger edit html and find these sentences.Now replace these sentences with your own descriptions.

This is default featured post 3 title

Go to Blogger edit html and find these sentences.Now replace these sentences with your own descriptions.

This is default featured post 4 title

Go to Blogger edit html and find these sentences.Now replace these sentences with your own descriptions.

This is default featured post 5 title

Go to Blogger edit html and find these sentences.Now replace these sentences with your own descriptions.

miércoles, 30 de julio de 2008

Ahora sí: esta es la Juve


El Trofeo TIM de ayer nos dejó, por momentos (más contra el Milan que contra el flojísimo Inter de Mourinho), tintes de partido oficial, nos dejó muchas impresiones y muy buenas y, sobretodo, nos ilusionó de manera definitiva, al menos, hasta el 12 o 13 de agosto, cuando tengamos que afrontar los partidos de verdad. Qué ganas teníamos de este trofeo y qué bien lo pasamos frente al televisor. La afición de la Juve ve como los momentos de crisis se pierden definitivamente por el retrovisor y al horizonte se atisva un nuevo viejo horizonte, con la posibilidad de luchar de verdad por el Scudetto, por la Champions, de afrontar partidos con la condición de favorita, como pasó ayer por la tarde.

Lo más importante es que nuestra ilusión, nuestro entusiasmo, nuestra rabia, han llegado al equipo, al que se le ve con ganas de jugar, de crecer y, sobretodo, de ganar. Lo que vimos plasmado en las ganas de Trezeguet por marcar su primer gol de la temporada, en la rabia de Iaquinta, que busca encontrar espacio y respeto en el equipo, en el resurgir de Marchionni, que hizo que no echasemos de menos a Camoranesi en la creación del juego, que combinó y que dio un espléndido pase de gol a David. Lo que vimos en la fuerza, en la garra y en la entrega de Nedved a sus 35 años; en la clase infinita de Alessandro Del Piero, que pudo marcar un gol de billar y en el admirable carácter de los jovencísimos Rossi (de lo mejor del equipo) y Ekdal. Pero quedó mucho mejor demostrado en el todo del equipo, un conjunto compacto que tiene el enorme mérito de haber sabido empezar esta temporada desde donde lo dejó la pasada campaña.

Dio ayer esa impresión la Juve frente a Milan e Inter, dos equipos, eso sí, muy por detrás en lo que a preparación se refiere, por lo que el juicio que podamos hacer del torneo puede ser un poco precipitado. Aunque eso sí, se vio dos equipos (especialmente el Inter) confusos, poco hechos y excesivamente cargados de confianza para enfrentarse a la Juve, que, en el mejor de los casos, tiene 11 Scudetti más que ellos. Si lo que nos mostraron ayer es lo que nos ofrecerán durante la temporada, la gente de Milan lo pasará mal este año. Ahora el objetivo de Milan e Inter es seguir creciendo y mejorar su forma. El de la Juve debe ser olvidar el gran papel desempeñado en el trofeo TIM (que tampoco se consiguió ganar, aunque por diferencia de goles) y seguir hacia adelante. En dos semanas llega la previa de la Champions.

lunes, 28 de julio de 2008

Juve da Champions


È una Juve da Champions. Esa es la primera conclusión que podríamos extraer de la victoria de ayer contra el Borussia en Dortmund. La Juventus dejó ayer una sensación de progreso y crecimiento constante que está alcanzando gracias al excelente trabajo que Ranieri y Cía. han preparado desde principios de julio. Siempre hay que tener en cuenta la fecha, estamos aún en julio, y aunque fuese contra un equipo campeón de Europa, era un partido amistoso sin más importancia. Por eso, la segunda parte, que arrancó con un carrusel de sustituciones, hizo perder mucho valor al partido. Pero, antes Amauri ya había marcado el primer gol a los cinco minutos escasos de partido, firmando con pluma de gran escribano un contraataque que inició Camoranesi y que al brasileño le llegó del pié de Grygera. Séptimo gol de Amauri en cuatro partidos. Después el revalorizado Iaquinta marcó otros dos goles para animar la tarde y finiquitar , antes de tiempo, un domingo feliz y tranquilo para todos, que mañana tocan en el trofeo TIM Milan e Inter, rivales mucho más poderosos, a priori, que los alemanes del Borussia.

La mejoría de ayer con respecto al partido del Brondby fue muy notable: la Juve fue un equipo más compacto, equilibrado, compacto, sincronizado y con las líneas más juntas, pero aún hay que engrasar la máquina y seguir entrenando la defensa colectiva, el modo de cerrar los espacios, el contragolpe y, sobretodo, la resistencia física, pues ahora a los 60 minutos las piernas se convierten en bloques de hormigón. Claudio Ranieri está viendo ya los frutos del trabajo realizado y la Juve cada vez se parece más al equipo que tendrá que jugar la ida de la previa de la Champions dentro de quince días. Ayer, con mensaje incluido para la prensa italiana, que gusta mucho de criticar las duplas de los equipos, Ranieri sacó de inicio a Mellberg y Chiellini en defensa, Sissoko y Zanetti en el medio y Trezeguet y Amauri en ataque. Nada que reprochar, aunque posiblemente el mister esperaba más de la pareja de delanteros. La crítica dice que son incompatibles, pero tanto el entrenador como cada uno de los aficionados nos resistimos a creer en ello, aunque ayer no se pasaron el balón en el tiempo que permanecieron juntos sobre el césped y su cordinación no fue la deseada. Amauri está volviendo a ser el delantero total que prometía, alejado del área, pero ayer Trezeguet también intentó serlo, y el resultado fue menos que aceptable. Trezeguet terminó ayer su tercer partido de pretemporada con el marcador particular a cero, algo para echarse a llorar en un delantero como él. Amauri no, Amauri sigue afianzándose en el equipo y entre la afición (ya nadie duda que, aunque más caro, es un fichaje mejor que el de Ronaldinho) con su séptimo gol de pretemporada y con la osadía de quien desea fulminar el famoso periodo de adaptación. Si sigue así, poco le faltará para convertirse en uno de los indiscutibles. Pero, ¿con quién? Por ahora, debería ser Iaquinta, que está al 100% físicamente, como pudimos ver con sus dos goles de ayer.

Con el segundo tiempo llegó la sangría de cambios. Ranieri dispuso sobre el terreno de juego otras parejas de baile: Legrottaglie y Knzevic, Ekdal (qué bueno) con Sissoko en el centro y con Marchionni a la derecha y Del Piero y Iaquinta en el ataque. Y otros cambios de los que son tan típicos a estas alturas como incomprensibles. Debutó Poulsen a 20 minutos del final y pocos instantes después, sirvió magistralmente un balón a Iaquinta para que el ex del Udinese marcase su segundo gol. Una asistencia de una bellísima factura (destacable por aquello de la falta de calidad que algunos le presuponen al danés), como espectacular el gol de Iaquinta; el tercero en dos partidos. Y pensar que todo el mundo daba a Vincenzo como suplente, como cuarto delantero o incluso decían que estaba fuera del equipo. La impresión que nos está dejando la pretemporada es que jugará muchos partidos. Iaquinta con Del Piero. O con Amauri. O con Trezeguet. En total son seis combinaciones distintas para la galería. Mamma mia.

jueves, 24 de julio de 2008

Europa, la Juve è tornata


La Juve 08/09 salió a Europa por primera vez y ganó su primer partido. No importa la escasa calidad técnica del rival (aunque el Brondby es un gran equipo en Dinamarca), ni que el equipo de ayer se presentase con 11 bajas (entre ellas Poulsen), ni que la segunda mitad del choque se fuese degradando poco a poco, hasta convertir el partido en algo ridículo, al son de los cambios: La Juve se exhibió ayer en Copenaghen, dejando muy buenas sensaciones para la previa de la Champions que tendrá que afrontar el próximo agosto. La Juve ayer cuajó un gran partido desde todos los puntos de vista (también del resultado), que basó en las ganas de volver a demostrar a Europa quién es la Juventus, de incrementar cada día la forma física y el punto del equipo y de intentar acallar las críticas surgidas en los últimos días que dicen que la Juventus es un equipo que no está preparado para luchar por los títulos por hacer unos fichajes, a juicio de algunos, inadecuados para la historia del club. Y con todo eso, más la calidad que sí tiene este equipo, consiguió una victoria, que nunca está de más, ni siquiera en un amistoso de verano. El sábado, en Dortmund, el partido será más complicado, pero la dificultad del rival es directamente proporcional a los progresos del equipo (planificación de la pretemporada muy acertada).

Tras la derrota en Trento contra el Piacenza y el nerviosismo generado esta semana era necesaria una inyección de optimismo. Copenaghen nos mostró que Amauri es un fichaje tan mediático como práctico, el ejemplo de que los mejores jugadores se pagan caros, pero valen la pena. El brasileño jugó durante toda la primera parte, marcó el primer gol, falló otro, pero sobretodo demostró entenderse a las mil maravillas con Iaquinta, a quien posiblemente hemos incluido entre los suplentes demasiado pronto. Juntos podrán/podrían derrotar a cualquier adversario, por su excelente compatibilidad táctica: Iaquinta; muy rápido, velocidad y remate, Amauri; el delantero total, con mucha calidad, brea y gol. De hecho, el primer gol fue de Amauri a un remate de cabeza tras centro de Molinaro (¿quién dijo que no sabía colgarla?) y el segundo de Iaquinta, a pocos minutos del descanso, yéndose del rival con un regate y poniéndola sublime dentro de la portería. Iaquinta marcó el gol de Amauri y el brasileño anotó como suele hacerlo Vincenzo. Sin faltar absolutamente para nada a la pareja Del Pîero y Trezeguet, primero y segundo máximo goleador de la pasada campaña, será muy difícil para Ranieri dejar fuera a uno de estos cuatro cracks, a menos que el posible tridente de ataque solucione el dilema parcialmente.

Los otros aspectos destacables del partido de ayer son la grande forma física de Nedved, que gracias a un largo periodo vacacional se encuentra físicamente por encima de sus compañeros, aunque por sanción no podrá jugar la ida de la previa de la Champions. Mejor el checo que Salihamidzic, que en teoría debería haber dado más por ser un teórico suplente con ganas de tener una continuidad que perdió en el tramo final de la pasada campaña, que pasó buscándose a sí mismo. Y si decíamos que no iba a ser fácil dejar como suplentes a Iaquinta o Amauri, tampoco lo será acomodar en el banquillo a Zanetti para dejar sitio a Sissoko o Poulsen. Pese a no estar al máximo, y con una movilidad más reducida, su única presencia le consintió a Ekdal mostrar su personalidad de veterano. Este joven centrocampista que se fichó de un equipo sueco por un puñado de euros es bueno, muy bueno, más de lo que cualquiera de los que apostó por él podría imaginar.

En definitiva, que se entere Europa: la Juve ha vuelto. Y por la puerta más grande posible. Cierto que ayer se vieron algunos desajustes en la línea defensiva, pero es algo lógico: Mellberg acaba de llegar, y siempre es la línea más difícil de ajustar en cualquier equipo. Nada importante ni definitivo. Lo que importa es la delantera que tenemos: una de las más importantes del continente. El complemento perfecto para un equipo casi perfecto.

viernes, 18 de julio de 2008

Dudas en la delantera

-

La derrota contra el Piacenza en el segundo amistoso de la pretemporada de la Juve, fue mucho más negativo de lo que en un principio pudiese parecer: no por el resultado, si no por la mala sintonia que se vio en la dupla Trezeguet - Amauri en su debut como pareja atacante y los resultados que ello puede acarrear para la temporada regular. El partido del martes se olvidará en menos de una semana de nuestras mentes, pero a Ranieri no se le irá de la cabeza la falta de entendimiento entre el italo-brasileño y el francés. Dicen que la primera impresión es muy importante, y para Ranieri, más aún.

Trezeguet y Amauri saben que su puesto en la titularidad no está asegurado y luchaban por el sitio de Del Piero, que la temporada pasada marcó más de 20 goles en la Serie A por segunda vez en su carrera (y con 10 años de intervalo). Quitarle el sitio a Alex es difícil. Ni haberle marcado un hat trick cada uno al Piacenza les hubiese asegurado nada. Pero el rendimiento que ofrecieron no le tuvo que preocupar demasiado a Del Piero: de momento, será titular. Y lo será porque Amauri y Trezeguet no se entienden. Sí, cierto, era la primera vez que jugaban juntos. Además, Trezeguet se ha perdido algunos entrenamientos por la inflamación de su rodilla y a estas alturas de la pretemporada las piernas pesan, y más a jugadores altos y fuertes como ellos, que necesitan una preparación física muy extricta. Pero el martes vimos al Amauri de '9' que no tuvo que hacer. Se convirtió en otro punta, ocupando los mismos espacios que Trezeguet y con los mismos movimientos. No vimos al equipo con alternativas en ataque como el que contemplamos el año pasado. Ni Trezeguet ni Amauri ofrecieron la creación de espacios y el desborde y desmarque de Iaquinta ni la capacidad de Del Piero para retrasar su posición y llevar la manija del equipo en las acciones ofensivas.

De todas maneras, no podemos decir que el ataque debastador de la Juventus ya haya desaparecido, ni muchísimo menos. De igual manera que tampoco podemos decir tan pronto que, a pesar del partido contra el Piacenza, Trezeguet y Amauri son incompatibles. Ranieri es inteligente y sabe qué hay que hacer: con el fichaje de Poulsen, la Juve se lo juega todo con sus cuatro delanteros, y sabe que de solucionar el problema o no depende el éxito o el fracaso de su proyecto (y podemos decir 'su' porque los fichajes han sido todos recomendaciones suyas). A pesar de que la solución parece obvia, el trabajo será duro. Hasta llegar al Palermo, Amauri había jugado siempre en la posición de 10, y el ser la punta de los sicilianos es posible que ahora le perjudique en su relación con Trezeguet. Pero Amauri posee las cualidades técnicas necesarias para volver a sus orígenes. Si lo consigue, el ataque de la Juve será realmente mortal. De una Juve que va a por todas. A por la Champions y a por el Scudetto. De una Juve a la que le queda un largo camino por hacer en poco tiempo.

viernes, 11 de julio de 2008

Verano de 2008. Año II después de Moggi

-

Por si a alguien se le había olvidado, por desagradable que sea, lo recuerdo: hace dos temporadas, la Juventus jugaba en campos de Serie B con aforo para 3000 espectadores. Ayer, me quedaba estupefacto al ver las reacciones en algunos medios italianos, en foros y webs de aficionados de la Juve al rumor sobre el fichaje de Poulsen (las críticas a Stankovic se van directamente al campo de lo moral, totalmente fuera de lo futbolístico, por lo que eran de esperar). Pero los ataques que ha recibido la directiva por el posible fichaje del danés me parecen totalmente desmesurados, fuera de lugar y que, es posible, que broten fruto de algunas frustaciones personales.

El no haber podido luchar realmente por el Scudetto desde diciembre hizo que los medios se lanzasen a crear un plebiscito sobre las posibles llegadas de Alonso o Aquilani desde mucho antes de que acabase la temporada y ahora la posibilidad de que no llegue ninguno, genera grandes desilusiones. Pero, ¿qué culpa le podemos achacar a la directiva con respecto a las portadas de los periodicos? Ni Alonso ni Aquilani son la solución a todos los problemas de la Juve, pero sí un paso adelante en el salto de cualidad definitivo que desde la directiva se dice que se quiere dar. Pero de igual manera, ese paso se puede dar con Poulsen. Dicen que faltará el regista, el centrocampista de toque. Hace tres temporadas, la Juventus ganó un Scudetto con Emerson y Vieira. Y hace cuatro años lo hizo con Blasi y el brasileño. Poulsen es un centrocampista de los que a lo largo de la historia han triunfado en Turín (como Prandelli, Capello, Sousa, Deschamps, Tacchinardi o Davids). Ha habido quien ha criticado a la directiva por que ni Alonso ni Aquilani decidían romper los contratos que tienen en vigor con sus clubes actuales, como si la Juve o cualquier otro pudiese manejar el mercado de fichajes a su antojo (cuando se ha demostrado que ni el Madrid con Ronaldo puede).

Además, la afición que existe en Italia por el calciomercato, las ansias por ver siempre caras nuevas, han extendido la creencia de que todo se arregla con un par de buenos fichajes. No hace falta remontarnos muy atrás en el tiempo para recordar los fichajes de Tiago y Almirón: la crítica era unánime, a todos nos gustaban esos dos fichajes y creíamos posible ganar el Scudetto con ellos. Después, todos sabemos lo que ha pasado. Por eso, cabe recordar ahora que cualquier operación de mercado comporta un riesgo, cada fichaje es un tiro al aire que nunca sabes donde irá a parar. La Juve ya ha fichado un crack. Se llama Amauri. Nadie duda de que es de los mejores del mundo, pero no sabemos qué es lo que le pasará en la Juve. Por ejemplo, la Juventus fichó a Henry, que por aquel entonces ya despuntaba, seis meses después de que ganase el Mundial de Francia y el francés no se adaptó al calcio. La clave del centrocampista que llegue ha de ser, como dijo ayer Ranieri, "que se integre bien en el equipo". ¿Quién hubiese apostado por el rendimiento que nos dio Sissoko desde el pasado enero?

Por último, lo que creo que la juventinitá no puede permitir ni soportar son las críticas a Blanc y Cobolli Gigli basándose en el trabajo que hubiese hecho Moggi. Primero y principal, recalcar que él nunca tuvo que enfrentarse a una situación semejante. Para hacer un pequeño parangón, podemos mirar las estadísticas de las dos últimas 'reconstrucciones' de la Juve. En la 94/95, después de ocho años sin ganar el Scudetto, y en la 99/00, después de que la Juve se clasificase para la Intertoto. El primer año citado, la Juve hizo unos fichajes magníficos: Ferrara, Deschamps, Paulo Sousa, Tacchinardi y Jarni. Verano de 1999: Bachini, Kovacevic, Oliseh, Van der Sar y Zambrotta. También Moggi fallaba en tiempos difíciles. Eso sin olvidar el por qué de esta reconstrucción de la Juve. El por qué descendimos a Serie B por primera vez en 109 años de historia. Por qué Ibrahimovic juega en el Inter. Y por qué no tenemos ya a Cannavaro, Zambrotta, Vieira...

martes, 1 de julio de 2008

Giampiero Boniperti: cuerpo y alma de la Juventus

-

Llegó con 18 años a la Juve en el verano de 1946. Fue un gran delantero (el máximo hasta que Del Piero batió su record hace 2 temporadas contra la Fiorentina), después directivo y finalmente presidente (1971 - 1990). Durante sus 19 años de mandato, la Juve vivió su época dorada, conquistando 25 títulos. El viernes cumplirá 80 años y es presidente honorífico de la Juventus.

"Juventino si nasce: tre parole che sintetizzano Giampiero Boniperti". Así le definieron en ocasión del lanzamiento de la muestra del museo de la Juve en honor al quinto aniversario de la perdida dell'Avvocato Agnelli. El próximo viernes cumplirá 80 años, de los cuales, más de 60, los ha dedicado a la Juve como jugador, como directivo y finalmente (de 1971 a 1990) como presidente antes de convertirse en presidente de honor, algo que fue muy incómodo para la Triada Giraudio - Bettega - Moggi, que le apartó durante los doce años que estuvieron en el club como si fuese un cualquiera, un objeto molesto en el eslavón de la cadena bianconera.

Bajo el mandato de Boniperti, que ha sido el presidente que más tiempo ha ocupado el cargo en la historia de la Juventus, la Società ha vidido los mejores momentos de su historia. El 'presidentissimo' le ha dado a la Juve 25 trofeos, primero como jugador y después como presidente. Son sus 9 títulos de Serie A que consiguió (uno cada dos años) como presidente en la vieja sede del club en la Piazza Crimea los que han marcado la historia de Boniperti y los que siempre pasarán a la historia. Es por esos nueve Scudetti que se le conoce como 'Presidentissimo'. Nacido en Barengo el 4 de julio de 1928, comenzó su carrera en el Momo. Llegó a la Juve a los 18 años en el verano de 1946 por 60.000 liras de la época gracias a dos periodistas que lo recomendaron a Piero Deruso, por aquel entonces presidente de la Juve. Y desde aquel día en que llegó a la Juventus, no se ha separado de ella. Quince temporadas como bianconero (como Del Piero, que le superará el próximo año) en las que jugó 460 partidos y marcó 179 goles (en una delantera mágica formada por él, Sivori y John Charles). Como presidente, otros 19 años y 25 títulos antes de asumir el rol de presidente honorífico que Moggi & Cía. nunca quisieron reconocer. Dimitió un 5 de febrero de 1990, harto del comportamiento de la directiva encabezada por Moggi, aunque ese año el equipo aún ganó una Coppa Italia y la Uefa, que están en su palmarés de presidente. Su lugar lo ocupó el actual presidente de la Ferrari, Luca Cordero di Montezemolo, que apostó por Gigi Maifredi en el banquillo. La primera Juventus de la era post-Boniperti quedó séptima en la Serie A y fuera de Europa.

Su etapa más amarga, como él mismo ha reconocido, fue la que la Triada dominó el club. Obligado a vivir al margen del equipo, Boniperti guardó escrupuloso silencio durante doce años. No le querían en los despachos de la nueve sede en Galileo Ferraris y dejó también de acudir al estadio. Su relación con la Juve se mantenía telefónicamente con llamadas periódicas a Gianni Agnelli. Boniperti, diez años después, volvió a pisar el Delle Alpi en los albores del Calciopoli, el 7 de mayo de 2006 con ocasión de un Juventus - Palermo. Ocupaba la posición que solía ocupar l'Avvocato Agenlli junto a su nieto John Elkman, mientras en la esquina superior izquierda Giraudio, Moggi y un Bettega con ojos lacrimosos empezaban a pensar sobre lo que habían hecho y las consecuencias que podría acarrearles. En uno de los fondos una larga pancarta les mostraba el apoyo del grupo ultra de aficionados de la Juve, que, a día de hoy, todavía defienden los hechos de Moggi.

Cuando al final de esa temporada la Juve bajó por primera vez en su centenaria historia a Serie B, la primera decisión de la familia fue la de crear un nuevo consejo de administración, darle la presidencia del club a Cobolli Gigli y devolverle importancia a Boniperti en su papel de presidente de honor. Realmente, en Italia aseguran que fue el propio Boniperti quien construyó la actual cúpula directiva de la Juve, pues John Elkman acudió a él en primera instancia en busca de ayuda, a modo de reconocimiento de su gran valía. Su última aparición pública en loor de multitudes fue el año pasado, cuando en el Olimpico de Turín se celebró el 110 aniversario de la Signora. Boniperti, con dificultades para aguantar las lágrimas, salió al campo rodeado de los jugadores que conformaban aquella plantilla de la Juventus de Serie B y de grandes mitos de la historia de la Juve como Marcello Lippi o Michel Platini. Boniperti marcó un gol simbólico que hizo explotar a todo el estadio y, como vemos en la fotografía superior, le entregó a Del Piero un brazalete de capitán eterno. Fue un día muy emocionante e intenso para el gran Boniperti. El próximo viernes cumplirá 80 años, y será otra fecha para recordar en la memoria de la Juventus.

Twitter Delicious Facebook Digg Stumbleupon Favorites More