De un batacazo tremendo nos hemos despertado. El sueño se ha terminado y la cruda realidad nos rebaja hasta la Europa League. Derrotados y humillados. La Juventus sólo ha sido capaz de ganar al Maccabi Haifa, el peor equipo de la historia de la Champions y ha encajado dos derrotas y dos empates en los otros cuatro partidos. No ha podido cosechar más de un punto ante los rivales de nivel. Eliminados en la primera fase de la Champions League, algo que no pasaba desde el 2000. Se ha esfumado el objetivo más importante, a nivel deportivo y económico, a las primeras de cambio. En lo material, la Juve pierde, de entrada, 4'5 millones de euros, lo mínimo que podía ganar pasando a los octavos de final (además de ver como sus acciones han bajado un 6'15%). Aunque el valor total de la pérdida, sumando los ingresos por las entradas, los bonus y los patrocinadores que ya no encontrarán seductora a la Juve, se calcula que podría ser de unos quince millones. Terrible.
Pero deportiva y emotiva y mentalmente, la situación es aún peor. Mucho peor. Buscar razones o, peor aún, justificaciones, se convierte en una misión casi imposible. Aunque no para la prensa, que en Italia se ha afanado a culpar a todos por todo. Jugadores en general, brasileños en particular, entrenador, preparadores físicos, directivos... Según el día y la hora, el enemigo público varía y nadie parece capaz de hacer un análisis objetivo y sosegado de por qué estamos aquí y cómo podemos salir de esta situación. Debastante. Porque la Juve es un equipo mejor que el de la temporada pasada bajo todos los aspectos y aún así tiene menos puntos que el equipo de Ranieri en sus dos temporadas anteriores, no ha llegado a los octavos de la Champions y tiene más, muchos más lesionados.
Los periódicos hablan de que el mercado de verano de la Juve, alabado por todos hace tres meses, ha sido un fracaso millonario. Que Melo ha sido la mejor vendetta de la Fiorentina y que Diego jugaba en la Bundesliga, definida como una liga de nivel menor, por razones evidentes. Otros se inclinan por culpar a Ferrara que, ha resultado para muchos, ser un fiasco después de la pretemporada estelar y del entusiasmo en Pinzolo. Seguramente, Melo sigue siendo el crack que demostró ser en una Fiorentina humilde que él, sólo él, sostuvo defensivamente y Diego, aunque sea una antorcha bajo el agua en el juego de la Juve no ha pasado de ser el heredero de Platini a sólo un error más caro que Poulsen y Tiago juntos. Pero entonces, ¿dónde está el origen de los problemas que se han tragado a la Juventus? ¿Por qué este equipo, por primera vez en más de un siglo de historia parece sin alma? ¿Por qué la Juventus se ha convertido en varios partidos de esta temporada (Palermo, Nápoles, Girondins, Cagliari y Bayern ), incluso ganando, como contra el Udinese, en un equipo dormido, cansado, sin garra, sin ganas de luchar, en una conjunción de campeones arremolinados, de confusión?
Diego y Melo, que han terminado los dos últimos partidos en el banquillo, son la triste imagen de un mercado que la caída europea ha desvirtuado hasta quién sabe cuándo. Del Piero y Grosso son viejas grandísimas estrellas que quizá empiezan a apagarse. Y Cáceres, cedido por el Barça sin demasiada fe en él, ya acumula varios partidos en los que es el menos malo del equipo ¿Pero qué está pasando? La Juve tiene el mejor portero del mundo, una buena defensa, un centro del campo de grandísimo nivel y una delantera verdaderamente envidiable. ¿Es posible que estos jugadores hayan rebajado su nivel hasta no merecer ni jugar a fútbol, da igual con la camiseta de la Juve que con la del Cittadella?
Realmente, resulta difícil de creer. En el equipo se ve una desmotivación atroz, nunca vista, pero también, aunque duela decirlo y reconocerlo, Ferrara ha decepcionado. La condición física del equipo no está a un nivel ni siquiera aceptable y las tácticas y algunas decisiones asombran tanto que desde el primer momento se atisba el fracaso. Ferrara es una gran persona, un símbolo de la Juve al que todo el mundo respeta y merece ser cuidado como tal, un grandísimo ex defensa y un gran experto de lo que es el fútbol, pero hasta ahora, como entrenador, ha aportado poco. Sí, ha querido darle al equipo otro estilo. Eso se ve, se aprecia y se agradece. Pero el resultado no es convincente y el precio que la Juve está pagando es alto. Cuatro goles a favor en seis partidos de Champions son una estadística tan pobre que por sí sola imposibilita el pase de ronda. Y en el campeonato los ridículos han sido más de uno y de dos. Vuelve la misma pregunta a la cabeza ¿Es posible que todos los cracks de la Juve hayan pasado en cuatro meses a ser jugadores de segundo o incluso tercer plano?
Y lo más preocupante de todo no es jugar la Europa League. No es ni un ridículo ni una vergüenza. Es lo mismo que le ha pasado al Liverpool o lo que hasta hace menos de un mes dábamos por seguro le iba a pasar al Bayern. Ellos, al igual que la Juve, han hecho fichajes estelares y su actuación en la Champions no ha estado a su altura. Pero no, la eliminación sólo es un síntoma de una enfermedad demasiado grave y de la que esperamos que Ciro pueda encontrar rápido la medicina. Antes de que el buen equipo se pierda en la espiral anodina y de críticas que ha recibido. Porque la Juve tiene jugadores para ser un gran equipo, pero ahora mismo parece todo menos un equipo. Permanecer todos juntos, jugadores, técnicos, directivos y afición seguro que es una buena manera de acompañar el tratamiento técnico-táctico del que se debe encargar Ferrara. Aunque no es fácil. La decepción ha sido tremenda para una afición sorprendida, impactada, amargada, indignada, enfadada, incrédula y nostálgica. Terriblemente nostálgica.
Pero deportiva y emotiva y mentalmente, la situación es aún peor. Mucho peor. Buscar razones o, peor aún, justificaciones, se convierte en una misión casi imposible. Aunque no para la prensa, que en Italia se ha afanado a culpar a todos por todo. Jugadores en general, brasileños en particular, entrenador, preparadores físicos, directivos... Según el día y la hora, el enemigo público varía y nadie parece capaz de hacer un análisis objetivo y sosegado de por qué estamos aquí y cómo podemos salir de esta situación. Debastante. Porque la Juve es un equipo mejor que el de la temporada pasada bajo todos los aspectos y aún así tiene menos puntos que el equipo de Ranieri en sus dos temporadas anteriores, no ha llegado a los octavos de la Champions y tiene más, muchos más lesionados.
Los periódicos hablan de que el mercado de verano de la Juve, alabado por todos hace tres meses, ha sido un fracaso millonario. Que Melo ha sido la mejor vendetta de la Fiorentina y que Diego jugaba en la Bundesliga, definida como una liga de nivel menor, por razones evidentes. Otros se inclinan por culpar a Ferrara que, ha resultado para muchos, ser un fiasco después de la pretemporada estelar y del entusiasmo en Pinzolo. Seguramente, Melo sigue siendo el crack que demostró ser en una Fiorentina humilde que él, sólo él, sostuvo defensivamente y Diego, aunque sea una antorcha bajo el agua en el juego de la Juve no ha pasado de ser el heredero de Platini a sólo un error más caro que Poulsen y Tiago juntos. Pero entonces, ¿dónde está el origen de los problemas que se han tragado a la Juventus? ¿Por qué este equipo, por primera vez en más de un siglo de historia parece sin alma? ¿Por qué la Juventus se ha convertido en varios partidos de esta temporada (Palermo, Nápoles, Girondins, Cagliari y Bayern ), incluso ganando, como contra el Udinese, en un equipo dormido, cansado, sin garra, sin ganas de luchar, en una conjunción de campeones arremolinados, de confusión?
Diego y Melo, que han terminado los dos últimos partidos en el banquillo, son la triste imagen de un mercado que la caída europea ha desvirtuado hasta quién sabe cuándo. Del Piero y Grosso son viejas grandísimas estrellas que quizá empiezan a apagarse. Y Cáceres, cedido por el Barça sin demasiada fe en él, ya acumula varios partidos en los que es el menos malo del equipo ¿Pero qué está pasando? La Juve tiene el mejor portero del mundo, una buena defensa, un centro del campo de grandísimo nivel y una delantera verdaderamente envidiable. ¿Es posible que estos jugadores hayan rebajado su nivel hasta no merecer ni jugar a fútbol, da igual con la camiseta de la Juve que con la del Cittadella?
Realmente, resulta difícil de creer. En el equipo se ve una desmotivación atroz, nunca vista, pero también, aunque duela decirlo y reconocerlo, Ferrara ha decepcionado. La condición física del equipo no está a un nivel ni siquiera aceptable y las tácticas y algunas decisiones asombran tanto que desde el primer momento se atisba el fracaso. Ferrara es una gran persona, un símbolo de la Juve al que todo el mundo respeta y merece ser cuidado como tal, un grandísimo ex defensa y un gran experto de lo que es el fútbol, pero hasta ahora, como entrenador, ha aportado poco. Sí, ha querido darle al equipo otro estilo. Eso se ve, se aprecia y se agradece. Pero el resultado no es convincente y el precio que la Juve está pagando es alto. Cuatro goles a favor en seis partidos de Champions son una estadística tan pobre que por sí sola imposibilita el pase de ronda. Y en el campeonato los ridículos han sido más de uno y de dos. Vuelve la misma pregunta a la cabeza ¿Es posible que todos los cracks de la Juve hayan pasado en cuatro meses a ser jugadores de segundo o incluso tercer plano?
Y lo más preocupante de todo no es jugar la Europa League. No es ni un ridículo ni una vergüenza. Es lo mismo que le ha pasado al Liverpool o lo que hasta hace menos de un mes dábamos por seguro le iba a pasar al Bayern. Ellos, al igual que la Juve, han hecho fichajes estelares y su actuación en la Champions no ha estado a su altura. Pero no, la eliminación sólo es un síntoma de una enfermedad demasiado grave y de la que esperamos que Ciro pueda encontrar rápido la medicina. Antes de que el buen equipo se pierda en la espiral anodina y de críticas que ha recibido. Porque la Juve tiene jugadores para ser un gran equipo, pero ahora mismo parece todo menos un equipo. Permanecer todos juntos, jugadores, técnicos, directivos y afición seguro que es una buena manera de acompañar el tratamiento técnico-táctico del que se debe encargar Ferrara. Aunque no es fácil. La decepción ha sido tremenda para una afición sorprendida, impactada, amargada, indignada, enfadada, incrédula y nostálgica. Terriblemente nostálgica.




7 comentarios:
Estoy hartoi de Ferrara, solo hay unos pocos partidos en los q la Juve parecia un equipazo, pero la triste realidad es q la Juve de verdad de esta temporada es la del Bayern.
Yo ya no respeto a Ferrara, si ama a la Juve deberia haberse largado para que el equipo intentara clasificarse que con el, era harto dificil.
Lanzo mi opinion con tristeza en el aire. Porque sabemos que una eliminación de Champions no solo desmotiva sino que conlleva una serie de encadenamientos. Se encadena la pasión, y disminuye la fé. Hoy fue el juego contra el Bari. Prendí el televisor con mucho miedo. Al empate me comía las uñas. Me arrepentí. Me desilusioné y me quedaron más dudas.
¿Diego fallando penales? ¿Una Juve que ataca y no anota? Una defensa ahuecada.
Triste, triste momento. ¿Y que puede calmarlo? Las estupidas declaraciones de los jugadores no ayudan (Legro ha dicho hoy after match: "Así llegaremos lejos") El Schudetto ya es una cima más grande que los Alpes, ahora. A menos que ALGO suceda! Una reacción! ALGO!!
Estamos muy lejos de todo, lo primero que hay que hacer es un meaculpa y despedir (o que renuncie) Ferrara, que admita que no puede.
En segundo lugar, contratar a un tecnico que haga jugar a Diego donde corresponde. No desperdiciar el Talento de Marchisio, sentar a los que corresponde sentar (Del Piero, Melo).
Lo que paso con el Bari, demuestra que esta Juve no esta para absolutamente nada en esta temporada.
Si la "verdadera" Juve fue la que jugó contra el Bayern, entonces me imagino que el "verdadero" United fue el RIDICULIZADO por el Barza en el Olimpico ¿no?
La "prensa" italiana culpa desde el principio a Diego y Melo por ser "muy caros" para el medio y eso que no llegan a 30 millones de euros (cifras, si no es más barato, que otros clubes han pagado por bodrios como Berbatov y Pepe). Lo curioso es que nadie dice nada del mediocre rendimiento de Eto'o o Huntelaar en Italia y lo costoso (casi tanto como Diego y Melo juntos) del fichaje del primero. Este hecho pinta de cuerpo entero la pobreza actual del calcio...
Cannavaro y Grosso no son malos, pero no pueden jugar todo el tiempo porque sus físicos los traicionan, aún así Ferrara los pone en el once tipo...
La liga alemana es en este momento por juego y, sobretodo, ORGANIZACION, muy superior a la italiana, es inutil negarlo, sólo que los tanos son demasiado obtusos para reconocerlo.
De los 7 goles que le han metido a la Juve en esta Champions, 6 han sido con pelota parada ¡Pelota parada!, algo que con Ranieri era muy dificil que ocurriera. Entonces, se debe a que Ferrara (como Deschamps en la B) renuncia al pressing y a ese trabajo táctico para que su equipo tenga más la pelota cuando desde el 2001 la Juve era equipo que no se caracterizaba por tenerla.
IMHO, Ferrara es el responsable de ello, la directiva contrató a quienes él pidió para esta campaña, los cambios de esquema se hicieron sobre la marcha y la inexperiencia que tiene en el cargo (primera temporada en absoluto como DT), manifestada en jugar con 4-3-1-2, 4-5-1 y 4-4-2 EN UN MISMO PARTIDO le han pasado factura. La Juve requiere un DT que garantice resultados y tenga un plan de juego definido, NECESITA a Guus Hiddink.
Dante dmateojfc@yahoo.com
¿Y porque Bettega no retorna al club? El es más hombre de fútbol que toda la actual directiva junta, ni siquiera fue nombrado en el proceso farsa y en lo único que estuvo vinculado (el supuesto "doping administrativo") fue TOTALMENTE ABSUELTO (algo que era obvio debido a que el proceso se dió por "clamore popolare" con "bases" construidas en el aire) junto con la Triade. NO hay argumentos para que sea desclasificado...
Dante dmateojfc@yahoo.com
ciro ferrara es un novato de tecnico,,la juve o tiene buena defensa...grygera,,zebina,,molinaro..legrotaglie son malos defensres,,cannavaro y chiellini ya estan lento igual grosso,,,se requiere cambio,,y juventud,,criscito,,brochetti..motta,,diego, mello y amauri,,sin cojones,,giovinco debe jugar,,del piero esta de ida,,,compren a rossi,,,falta un lider
Con esos mismos jugadores y haciendo constantemente la trampa de off-side la temporada pasada la Juve no era tan vulnerable y menos a balón parado, salvo errores puntuales como contra el Chelsea, mientras que ahora es sistemático. Basta ver los goles del Bari o los del Bayern, goles totalmente ridículos para un grande. También se puede decir que Amauri es un "paquete" pero resulta que él es el gran sacrificado del 4-5-1 porque en ese esquema el delantero no es centrodelantero a menos que se juegue mucho por banda, cosa que esta Juve no hace, sino un pivot para los 3 volantes ofensivos (se supone qué tiene que hacer los goles pero resulta que sale del área para apoyar a Giovinco, a Diego o a Camoranesi puesto que no le llegan pelotas de gol) ¿Cómo se le puede exigir los goles si está obligado a jugar por las bandas? Su mejor momento coincidió cuando él sólo tenía que anotar ya que Del Piero era quien abría los espacios...
Dante dmateojfc@yahoo.com
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