This is default featured post 1 title

Go to Blogger edit html and find these sentences.Now replace these sentences with your own descriptions.

This is default featured post 2 title

Go to Blogger edit html and find these sentences.Now replace these sentences with your own descriptions.

This is default featured post 3 title

Go to Blogger edit html and find these sentences.Now replace these sentences with your own descriptions.

This is default featured post 4 title

Go to Blogger edit html and find these sentences.Now replace these sentences with your own descriptions.

This is default featured post 5 title

Go to Blogger edit html and find these sentences.Now replace these sentences with your own descriptions.

lunes, 31 de agosto de 2009

'O Rei' Diego


Roma - Juventus, 1-3
Roma (4-3-2-1): Julio Sergio; Cassetti, Mexès, Burdisso, Riise (71’ Vucinic); De Rossi, Taddei (45’ Tonetto), Pizarro; Perrotta (80’ Cerci), Ménez; Totti. A disposición: Arthur, Juan, Motta, Guberti, Baptista. Entrenador: Luciano Spalletti.
Juventus (4-3-1-2): Buffon; Grygera, Cannavaro, Chiellini, De Ceglie (74’ Legrottaglie); Tiago, Marchisio (62’ Camoranesi), Felipe Melo; Diego (85’ Poulsen); Amauri, Iaquinta. A disposición: Manninger, Molinaro, Del Piero, Trezeguet. Entrenador: Ciro Ferrara.
Árbitro: Rocchi. Amonestó a Tiago, De Rossi, Taddei, Diego, Perrotta, Marchisio y Grygera.
Goles: 24’ pt Diego, 35’ pt De Rossi, 22’ st Diego, 45+2’ st Felipe Melo.

Tres a uno a la Roma. Tres goles brasileños. Tres goles recién fichados. Más de tres razones para, antes de entrar a analizar el partido, felicitar y agradecer a la directiva de la Juventus el esfuerzo realizado este verano y que se verá completado hoy con el fichaje del lateral que falta. Grosso o Dossena ocuparán el lugar que debía ser (y así lo tenía planeado Ferrara) de Criscito, pero que las necesidades económicas le arrebataron. Pero con la inversión que se realizó con ese dinero no cabe ni un ápice de crítica. Porque, como ya dicen en Italia, la Juventus compró un crack al precio de un buen jugador. Porque después de los noventa y cinco por Ronaldo o de los setenta por Ibrahimovic y casi por Kaká, comprar a Diego por menos de veinticinco es, sin ninguna duda, el mejor fichaje del verano.

El 3 -1 final es el reflejo de un partido que la Juve dominó cuando quiso y en el que tomarse una pausa le dio a la Roma una sensación mínima de poder reintegrarse en el choque. Pero no fue así, porque esta Juventus, además de ser el equipo fuerte, físico y poderoso que nunca da un segundo por perdido, encima rezuma calidad individual: la de Diego Ribas da Cunha, el número 28. Acordaos bien de este número, porque en el almanaque juventino pronto pasará a tener una especial importancia. Porque Diego ayer demostró, como reconoció después Ferrara, poder hacerlo mejor de cuanto imaginábamos. El blanco y negro le motiva y poder recuperar la historia arrebatada de uno de los equipos más grandes del fútbol, más aún. Tiene el balón y lo defiende como el mejor de los medios, y define y marca como un gran delantero, algo que no se veía hacer así en Turín desde los tiempos de "Le Roi", al que pronto podría sustituirle "O Rei". De él nace el juego de la Juve, él lo distribuye y ayer, además, él lo finalizaba. Primero en el minuto 25, con la inestimable ayuda de Cassetti: el defensa no controló un balón raso y Diego aprovechó su error y después de una carrera de cincuenta metros y de evitar la embestida de Riise, batió a Julio Sergio por el segundo palo. Mejor, sin colaboración rival, fue su segundo de la tarde; la definición perfecta del juego que quiere Ferrara. Verticalidad y juego directo: toque de Cannavaro para Iaquinta, alarga el delantero al primer toque y Diego, fintando a Mexès, bate nuevamente a su compatriota Julio Sergio.

Era el 1-2 porque antes la Roma había aprovechado una falta para poner la igualada en una jugada de pillería que no gustó nada a Buffon. Una falta cometida sobre Totti la sacó rápidamente Pizarro y De Rossi empaló desde fuera del área cargando las baterías de la Roma para el resto del partido. Incluso hasta el punto de permitirles casi llegar al descanso con ventaja en el marcador después de que el tercer portero de la Roma, "el mejor tercer portero del mundo" para Spalletti, desbaratase un gran disparo de otro brasileño, aunque por poco tiempo, Amauri, desviando al palo: una gran acción de Menez dejaba sólo a Totti ante el mejor portero del mundo. Pero un mano a mano contra Buffon, aunque uno se llame Totti, no es garantía de nada, y Buffon, con el puño fuerte, dejó las cosas como justamente estaban. Después el protagonismo, ya en la reanudación, fue para su homólogo romanista: Julio Sergio paró dos tiros francos de Amauri (53' y 65') y vio como otros dos remates de Iaquinta (uno con el pie tras ganar por velocidad a Mexès y otro anticipándose a la defensa romana de cabeza) se iban altos. Eran, una tras otra, la confirmación de que la Juve sigue creciendo y de que seguirá haciéndolo. Melo, Marchisio (que se fue lesionado en la segunda parte) y Tiago hicieron un gran papel en el medio, deshabilitando la superioridad numérica que Spalletti creyó suficiente para contrarrestar el potencial de la Juventus, e incluso vimos algún buen centro de Grygera. Ninguno de De Ceglie, que volvió a sufrir y tuvo que ser sustituido a 15' del final para evitar sustos de última hora innecesarios por Legrottaglie y devolviendo a Chiellini a su antigua posición de lateral izquierdo, donde sigue desenvolviéndose con soltura ¿Podría ser esa la solución si no llegasen Grosso ni Dossena? Ferrara, por si acaso, prueba.

Esa era su respuesta al 0-4 que Mourinho le endosó al Milan el sábado. Una respuesta de campeón que dará batalla hasta el final para recuperar el título de campeón de Italia que le pertenece. Porque al final, con el tiempo cumplido, ya en el descuento, llegó el 1-3 mediante un tiro lejano y raso de Felipe Melo. El partido de ayer, ya dentro de la oficialidad, podría verse como la confirmación del buen trabajo desempeñado este verano en todos los ambitos y el pistoletazo de salida a los sueños y las ilusiones. A las ansias de ver una Juve dominante y ganadora como la de hace años. La del Avvocato. Y Ferrara después del partido dijo que "esta Juve le hubiese gustado al Avvocato". Así que...

Puedes ver el resumen del partido en Curva Bianconera TV.

viernes, 28 de agosto de 2009

Sneijder deja a Mourinho sin excusas

La actitud de Mourinho denota miedo. O temor. O quizá excesivo respeto, quién sabe. Pero algo hay que enturbia el pensamiento del portugués. El primer día de trabajo dijo que su equipo no era "el Inter que quería". Por aquel entonces, los únicos fichajes habían sido Motta y Milito y aún tenía a Ibrahimovic. Después se fue el sueco y llegó Eto'o en una operación redonda para su equipo en el plano económico y, quien sabe por qué, Mourinho pasó de decir que "el Inter no está entre los mejores de Europa" al "sin excusas" del sábado pasado, cuando no quiso justificar de ninguna manera el empate y la casi derrota contra el Bari.

Como ha reconocido en más de una ocasión, pidió a Moratti "un defensa, un centrocampista, un mediapunta y un delantero" y sus deseos han sido concedidos noventa y tres millones mediante. Con la llegada de su ansiado 'diez', el Inter que ha empezado titubeante la temporada es una creación 100% Mourinho y no la versión 2.0 nada evolucionada del equipo que dejó Mancini. Con el holandés suman cinco refuerzos que apuntan a la titularidad. Cinco novedades de once: Lucio, Motta, Sneijder, Milito y Eto'o; casi medio equipo. Pero ni siquiera eso se le aceptará como excusa en caso de que el proyecto no frague. El juego del equipo debería cambiar con la inyección de calidad en la media, aunque, por otra parte, al Inter se le ha terminado el recurso fácil de pasarle el balón a Ibrahimovic para que el sueco resolviese. Ahora, con dos nueves, se necesitará algo más desde atrás.

El caso de Sneijder es muy parecido al de Quaresma. Mourinho se comportó igual el verano pasado y no paró hasta conseguir que llegase el extremo portugués: Moratti tuvo que pagar casi treinta millones de euros el último día del plazo de fichajes para quitarselo al Porto para que sólo tres meses después acabase cedido en el Chelsea, donde tampoco jugó. Aún así, Moratti ha seguido comportandose como el derrochador complaciente que es y le ha concedido a Mourinho su último deseo para perfeccionar un equipo que debe aspirar a todo. Aunque él quizá tenga alguna duda. O al menos, parece que la tenga. Porque está nervioso, ve sombras y oye ruidos y pretende hacer de su equipo un coto privado para los opinadores. Le sentó mal que Lippi pronosticase que la Juve iba a ganar la Serie A, sigue sembrando dudas con los arbitrajes y ahora incluso sospecha de la honestidad de Juve y Milan, que "son amigos" en la última jornada. Sí, el mundo está contra Mourinho. Ha pedido "tres o cuatro meses" para conformar un equipo ganador. Intenta ponerse la venda antes de que algún otro se sume al Bari y le hiera. No se da cuenta de que Sneijder le ha dejado sin excusas.

lunes, 24 de agosto de 2009

Incontenibles e incontestables


Juventus - Chievo. 1-0
Juventus (4-3-1-2): Buffon; Grygera, Cannavaro, Chiellini, Sa­lihamidzic (1’ st De Ceglie); Tiago (29’ st Marro­ne), Poulsen, Marchisio; Diego (42’ st Camo­ranesi); Amauri, Iaquinta. A disposición: Manninger, Le­grottaglie, Molinaro, Trezeguet. Entrenador: Ciro Ferrara.
Chievo (4-3-1-2): Sorrentino; Frey, Morero, Yepes, Mantova­ni; Luciano, Rigoni, Marcolini (21’ st Bentivoglio); Pinzi (38’ st De Paula); Bog­dani (26’ st Granoche), Pellissier. A disposición: Squizzi, Mandelli, Malagò, Ariatti. Entrenador: Domenico Di Carlo.
Árbitro: Gava. Amonestó a Poulsen, Marrone, Rigone y Pinzi.
Goles: 12' pt Iaquinta.

Espectacular en el primer tiempo, guerrera en el segundo, la primera Juventus real de Ciro Ferrara ganó al Chievo no sin sufrir o dejar alguna duda, pero con mérito y entusiasmando a un público totalmente entregado a la pasión de un equipo. Mérito de Diego Ribas, que vuelve a hacer soñar al público turinés inventando fútbol como no lo hacía la Juve desde la época de Zidane o Platini; pero también del carácter que Ciro Ferrara ha sabido inculcar a su equipo. Ayer todos los jugadores estaban entregados a la causa, atacando y defendiendo, dando más de lo que permiten las energías a estas alturas. Un aparte merece la actuación de los laterales (ni uno solo de los centros de Grygera encontró destinatario), pero parece que la directiva está trabajando para reforzar esa parcela y en los próximas días podrían llegar Rafinha y/o Grosso. Así como el segundo tiempo, en el que el equipo se perdió no se sabe donde y en el que puso sólamente garra y corazón. Pero un partido como este, la Juventus del año pasado lo hubiese empatado, y ayer lo ganó. Y eso es una gran diferencia.

Con Del Piero en la grada por su lesión en la espalda, Ferrara optó por Iaquinta junto a Amauri por delante de Diego. En el centro, Poulsen entró en el sitio de Felipe Melo, que cumplía una sanción de la temporada pasada, junto a Marchisio y Tiago. Para poder frenar el caudal ofensivo de la Juve, Di Carlo decidió contrarrestar calcando el sistema y puso a Rigoni por delante de su defensa para intentar parar a Diego. Pero fue en vano. Ni las ayudas constantes de Pinzi, más centrado en ayudar que en su posición de mediapunta creador, y Marcolini pudieron parar a Diego, que aparecía por todas partes para intentar conducir a la Juventus hasta la victoria. El aire revolucionario que trae el brasileño afectó ayer a todo el equipo (como se esperaba, por otra parte): hizo que Iaquinta abriese espacios y alargase su posición continuamente; Amauri estuvo participativo y generoso. La sociedad con Diego es perfecta y no pararon de demostrarlo dialogando continuamente y con excelentes combinaciones (incluso varias de tacón).

La Juventus tiene más calidad que el año pasado y ayer se centró de sacarle a ella el mayor partido posible, centrando su juego en Diego, Amauri y Iaquinta. El Chievo, que no hace ni tres meses marcó tres goles en el Olimpico se vio abrumado por la máquina juventina y sólo pudo intentar pararla (sin conseguirlo) a base de faltas. A base de faltas a Diego, claro. Tres en menos de quince minutos que le costaron la primera amarilla a Rigoni (y dos que el árbitro ahorró a Marcolini y Pinzi). Viendo la superioridad aplastante del equipo, el gol parecía sólamente cuestión de tiempo. Y nació de una de esas faltas de tantas quer recibió ayer la Juventus. Era el minuto 12 y del segundo intento de Diego (el primero, sacado con maestría, no encontró rematador) salía un centro perfecto que Iaquinta remató imperiosamente, saltando entre tres defensores del Chievo para enmarcarlo en la escuadra de Sorrentino.

La celebración de Vincenzo, cargada de furia, fue sólo una muestra más del carácter de este equipo. Y un aviso de que no va a dejar de luchar ni un sólo minuto para rehacerse con la gloria arrebatada. Y tampoco lo hizo ayer, obviamente. En el minuto 26, Amauri sacaba otra gran asistencia tras una acción espectacular cargada de técnica y potencia, pero el cabezazo de Iaquinta en este caso se encontró con el pie de Sorrentino. Al final de la primera parte, Diego consiguió levantar al público del estadio, que le brindó una gran ovación después de que un disparo suyo se fuese a centímetros de la portería. Así se cerró el primer acto, con alegría, pero con la sensación de que un gol era demasiado poco y que con más precisión se hubiese evitado por completo el sufrimiento del segundo tiempo. Porque el Chievo salió con otra actitud en la reanudación y las muchas energías empleadas por la Juve en la primera parte terminaron por frenar el engranaje juventino (Poulsen se vio muy superado ahí y cometió demasiadas faltas). Así el Chievo se convirtió en un equipo bastante peligroso y empezó a visitar con más asiduidad a Buffon (en el 10' de la segunda Grygera dejó sólo a Bogdani y dos minutos después cometió un penalti que no señaló sobre Pellissier).

También influyó la entrada de De Ceglie por el lesionado Salihamidzic en el lateral izquierdo. El resultado fue una Juve deshecha en la defensa y un Chievo que por su derecha aprovechaba los muchos huecos que regalaban las subidas desmedidas de De Ceglie y un segundo tiempo demasiado sufrido que ocasionalmente se vio endulzado por las invenciones de Diego, cuyo rendimiento fue constante hasta el momento en que fue sustituido por Camoranesi en el 87', la potencia de Amauri y la fuerza de Iaquinta. En definitiva, se vio una Juve preparada, pero mejorable. Esta semana será crucial para completar alguna de esas mejoras tan necesarias.

> Puedes ver el resumen del partido en Curva Bianconera TV.

domingo, 23 de agosto de 2009

Falta de respeto


Los valores de algunos pueden ser algo caducos. Los que siguen la teoría de la conspiración y se escandalizan con un simple pronóstico pierden la razón cada vez que las comisuras de sus labios vuelven a juntarse. Alguien tan dado a faltar al respeto a los demás se sintió agredido cuando Lippi apostó por la Juventus para ganar este Scudetto. "Me han faltado al respeto". El año pasado el seleccionador apuntó hacia su equipo y no sintió nada especial. Hoy ha sido uno de su equipo el que ha faltado al respeto de un rival y al fútbol en general. Indica una falta de dignidad en este caso propia. Lo peor de todo es que esta falta de Materazzi no fue ni siquiera tarjeta amarilla. ¿Pero no estaba condicionado este campeonato? ¿Hacia que parte?

> Aquí la secuencia completa de la falta de Materazzi a Álvarez.

sábado, 22 de agosto de 2009

Así empieza la temporada


Mañana comienza la singladura de la nueva Juve en la Serie A. Y lo hace con un ambiente completamente distinto. Lo hemos hablado muchas veces, pero es asombroso el cambio. Porque ahora hay muchísimo entusiasmo, expectación y ganas de jugar cada partido. En el fondo, este equipo induce a soñar con conquistar las cotas más altas. La Juventus de Diego y Melo, de la columna brasileña con Amauri delantero, de los cracks que están y los que vuelven con todo el hambre del mundo bajo la batuta del entrenador-motivador Ciro Ferrara gusta mucho a juventinos y no, y las previsiones ya no tienen una dirección del todo clara hacia la que apostar. El Inter ya no está lejos; sigue siendo la escuadra a batir, pero se ve más accesible. El Milan está por detrás de la Juve, hay que tenerle en cuenta, pero está un nivel por debajo. El resto de equipos; Roma, Fiorentina o Genoa, son buenos equipos, pero están a una distencia considerable que le permite a la Juventus observarlos sin excesiva preocupación.

Un día antes del debut contra el Chievo hay muchas cosas hechas de manera satisfactoria, pero otras tantas quedan por hacer. La primera obviedad que salta a la vista es que el grupo ha recueprado la mentalidad ganadora que ha caracterizado siempre la historia de la Juventus. La vuelta de Fabio Cannavaro, la renovación de Del Piero, las ganas de volver a ser él de Camoranesi y el afán de superación de Buffon unidos al entusiasmo con el que han llegado los nuevos han hecho olvidar la mentalidad de equipo pequeño que existía con Ranieri. Ese fue el primer paso dek trabajo de Ferrara y está superado con algo más que éxito: todos los jugadores quieren ganarse un sitio y darlo todo para ganar cada partido. Desde el punto de vista técnico hay que destacar primero la clase de Diegas, que cada vez que ha entrado en el equipo ha demostrado que él es el crack y el cerebro que necesitaba indispensablemente la Juve para crear el juego; segundo, el crecimiento de Marchisio, que se ha ganado la convocatoria con Italia después de muchos partidos jugados con calidad y autoridad; y tercero, la capacidad goleadora de Amauri, que ha culminado una pretemporada espectacular, marcando siete goles.

Por otra parte, también hay que ser conscientes de los propios defectos: la Juve ha mostrado una cierta irregularidad a lo largo del verano. Jugó su mejor partido contra el Madrid, el peor contra el Villarreal, combinando con grandes tiempos (como la primera parte ante el Sevilla y contra el Milan en el Tim) y otras actuaciones peores (Nancy o la segunda mitad del Trofeo Berlusconi). Digerir un cambio de sistema tan radical como el que pretende Ferrara no es fácil y a menudo el equipo concede demasiados espacios al rival: el equipo debe estar junto o trabajar con solidaridad y más intensidad, si no se corren muchos riesgos (pasó en la derrota contra el Villarreal y contra el Milan y también en el Tim contra el Inter, donde la Juve sólo ganó por penaltis). Felipe Melo, que entró más tarde en el equipo, no parece del todo integrado en el engranaje: en ocasiones juega demasiado acelerado, cometiendo más faltas de las necesarias; en la fase de creación tiene demasiado el balón en los pies, intentando demostrar algo que no tiene que hacer, porque sencillamente no es su papel. Su labor en el equipo es evitar que no pase nadie y cuando tiene el balón pasarla rápida y con claridad, como quiere Ferrara, sin carreras con el balón. Aunque también hay que recordar que el brasileño está realizando ahora un trabajo doble y falta por ver qué pasará cuando esté Sissoko.

Precisamente la ausencia de Sissoko es fruto de otro de los males de la Juventus, que sigue obligada a convivir con las lesiones. Al malí se le han unido Tiago, Giovinco, Diego, Camoranesi y Zebina. No parece nada grave y algunos de estos estarán mañana en el Olimpico, pero Ferrara aún no ha podido jugar con el equipo que tiene en mente. A esto también hay que añadirle un déficit evidente en ambos laterales; corregible sólamente a través de algún fichaje, porque la carestía en esa zona es obvia. El 4-3-1-2 requiere un sobresfuerzo de los laterales, que deben desdoblarse para atacar, pero nunca dejar desprotegida su zona para no sufrir la superioridad numérica del rival. Grygera sabe que no es el preferido para Ferrara y se ha resentido tanto ofensiva como defensivamente: sus centros son muy deficientes y en defensa acostumbra a ser el perdedor después de un uno contra uno; Zebina lo puede hacer mejor quizá, pero es demasiado inconstante (a causa de las lesiones principalmente) y ahora mismo no se puede dejar un peso tan importante sobre sus espaldas; Molinaro no consigue dar lo mejor de sí tras superar su grave lesión y De Ceglie sigue algo inmaduro, seguramente su posición ideal sea en el centro. Y aquí sí, el Inter es muy superior. Mourinho puede elegir entre Maicon, Zanetti, Chivu y Santon. Cualquiera de ellos sería indiscutible en la Juve. El trabajo del verano ha sido muy bueno, pero siempre se puede mejorar. Hasta el 31 de agosto.

martes, 18 de agosto de 2009

Diego cierra el círculo, pero ojo


Milan - Juventus 1-1 (5-4 en penaltis)
Milan (4-3-1-2): Storari; Zambrotta, Nesta, Thiago Silva, Jankulovski; Flamini, Pirlo, Gattuso (15’ st Abate); Ronaldinho; Pato (33’ st Inzaghi), Huntelaar (15’ st Borriello). A disposición: Roma, Favalli, Antonini, Onyewu. Entrenador: Leonardo Araujo.
Juventus (4-3-1-2): Buffon; Grygera (15’ st Zebina), Cannavaro, Legrottaglie, De Ceglie (1’ st Molinaro); Salihamidzic (37’ st Poulsen), Felipe Melo, Marchisio; Diego (28’ st Yago); Ia­quinta (1’ st Amauri), Trezeguet. A di­sposición: Manninger, Ariaudo. Entrenador: Ciro Ferrara
Árbitro: Orsato. Amonestó a Legrottaglie y Pirlo.
Goles: pt 29’ Diego; st 23’ Pato
Tanda de penaltis: Yago parado; Pirlo gol; Trezeguet gol; Ronaldinho gol; Felipe Melo gol; Borriello gol; Marchisio gol; Inzaghi gol; Amauri gol; Thiago Silva gol.

La vuelta de Diego al equipo ha confirmado las buenas sensaciones que dio contra el Seongnam en la Copa de la Paz. Con él en el campo, todo está más claro y Ferrara puede cerrar el círculo de su sistema táctico que tiene la organización 4-3-1-2 como punto central. Más allá del gol, que podemos dejar en anécdota por el rebote de su disparo en Thiago Silva, ayer pudimos ver cuál será el punto referencial de la Juve que se estrenará el domingo contra el Chievo. Diego ha demostrado tener clase y personalidad para dirigir todo el sistema ofensivo de la Juventus, por fin dotado de fantasía y calidad. El jugador que la Juventus no tenía desde que se fue Zidane.

El progreso de asimilación del nuevo sistema por parte de la Juve registra progresos, en grandísima parte, gracias a la entrada de Diego, que sí le da sentido al juego del equipo. Aún así, hay que remarcar diversos aspectos negativos que ya deben tenerse en consideración y no tomarlos como simples casualidades. Puede que la acumulación de partidos y la concentración ya puesta en el debut del domingo en Serie A influyeran ayer, pero la defensa de la Juventus no está mostrando la solidez que se le supone. Legrottaglie, con el protagonismo perdido con la llegada de Cannavaro, no es el mismo del año pasado: ha perdido confianza y está lento de velocidad y en la ejecución; Felipe Melo debería dar más solidez defensiva, garantizar una mayor cobertura en el centro, pero sin embargo se le ve demasiado nervioso (ha tenido ya enfrentamientos con Ronaldo, Stankovic y ayer de nuevo con Gattuso) y da la impresión de querer hacer más de lo que puede, como si tuviese que demostrar algo que no hace falta; ayer se empeñó en seguir con la pelota en los pies en zonas donde no conviene tenerla, perdió muchísimos balones cerca de su propia área y estuvo mal en la salida; hasta el punto de regalarle un golazo a Pirlo en la primera mitad y que terminó estrellado en el palo.

Ayer además, seguramente por la proximidad del campeonato, Iaquinta no fue ese delantero solidario, trabajador y que aporta dinamismo al ataque y la línea de arriba, hasta la entrada de Amauri, estuvo un poco inconexa. Con el brasileño que será italiano en dos semanas sobre el campo, más fresco, la cosa varió en la segunda mitad. Diego y Amauri forman una sociedad brillante y quedó patente desde el primer minuto de la reanudación: falló Trezeguet, demasiado lento, en la finalización, pero el dribling de Amauri y el toque de Diego en esa acción fueron de muchísimos kilates. Sólo un minuto después, el dúo dinámico volvió a convinar, pero fue Zambrotta en este caso quien desbarató la jugada rechazando a corner. El 28 (atención a este número a partir del domingo), estaba previsto que jugase sólo medio partido, pero se quedó hasta casi el 75', poniendo en pie a la Curva Nord de San Siro, ayer tomada por cinco mil juventino, cuando fue sustituido por Yago. Amauri siguió demostrando que es el delantero de la Juve más en forma en este verano, pero con la salida de Diego se apagaron las luces del equipo y los delanteros lo notaron un poco, aunque Yago mostró buenas maneras trenzando un par de jugadas de muy alto nivel.

Finalmente, el gol en el 23' de la segunda del Milan, significó también la rendición de la Juventus, que no pudo aguantar la superioridad numérica del 4-3-3 de Leonardo, que después de ocho derrotas, podría sumar su primera victoria. Pero no, siguiendo la teoría del brasileño, siempre recién salido de la peluquería, el partido acabó en empate. Ni vencedores ni vencidos. Si el Milan no ha perdido ocho partidos, este último Trofeo Berlusconi debe quedar desierto. No debería importar que después del gran gol de Pato a centro de Abate (con la colaboración de la defensa, que no estuvo bien en el repliegue) hubiese una tanda de penaltis en la que falló Yago y Thiago Silva marcó el penalti definitivo para el Milan. Pero la realidad es muy distinta y la teoría de Leonardo completamente falsa. El Milan ganó ayer el trofeo Berlusconi, hay fotos que lo acreditan. Y eso es tan cierto como que antes perdieron ocho partidos de manera consecutiva.

> Puedes ver el resumen del partido en Curva Bianconera TV.

sábado, 15 de agosto de 2009

Una Juve ganadora invierte la tendencia


Juventus - Inter, 1-1 (7-6 en penaltis)
Juventus(4-2-3-1): Buffon; Grygera, Legrottaglie, Cannavaro, Molinaro; Feli­pe Melo, Poulsen; Salihamidzic, Tiago, Iaquinta; Amauri. A disposición: Chimenti, Man­ninger, Cáceres, Chiellini, Ariaudo, De Ceglie, De Paola, Alcibiade, G. Giovinco, Marrone, Immobile, Yago. Entrenador: Ciro Ferrara.
Inter (4-3-1-2): Julio César; Santon, Ma­terazzi, Samuel, Chivu; Vieira, Cambias­so ( 35’ Krhin), Thiago Motta; Stankovic; Quaresma ( 42’ Rivas), Mancini ( 36’ Mili­to). A disposición: Toldo, Orlandoni, Obi, Caldi­rola, Alibec, Crisetig, Destro, Balotelli. Entrenador: José Mourinho.
Árbitro: Damato. Amonestó a Felipe Melo y Stankovic.
Goles: 26’ Thiago Motta, 44’ Amauri.
Penaltis: Milito gol, Saliha­midzic gol, Balotelli gol, Grygera gol, Chivu gol, Felipe Melo gol, Thiago Motta gol, Poulsen palo, Samuel fuera, Amauri gol, Vieira gol, Iaquinta gol, Santon pa­rado, Legrottaglie gol.

A la novena fue la vencida y la Juve de Ferrara consiguió ganar por primera vez el TIM. No es el Scudetto, pero sí sirvió para certificar (si es que aún hacía falta) que el equipo de Ferrara está preparado para luchar por todo al máximo nivel. El primer partido contra el Inter nos dejó lo que puede ser un adelanto de la próxima Serie A: un gol para cada uno, un penalti pitado y después fallado, una expulsión, algunas peleas sobre el campo y las primeras protestas de Mourinho durante y tras el partido. Un Juve - Inter nunca puede ser un amistoso y ayer en la mini versión de cuarenta y cinco minutos ya pudimos ver de todo: un Inter que jugó mejor y gustó más contra una Juventus más efectiva y concentrada en obtener una victoria de éxito tras el último desliz contra el Villarreal. De hecho, si Julio César no hubiese parado magistralmente el penalti que lanzó Iaquinta, la Juventus hubiese conseguido remontar el partido en los 45 minutos reglamentarios (después lo hizo en la tanda de penaltis).

Los enfrentamientos entre Melo y Stankovic (dos provocadores) en los primeros minutos podían dar un sentido a lo que ibamos a ver después: un partido cargado desequilibrado por la agilidad y velocidad de Quaresma, que nunca había jugado un partido tan bueno en su breve experiencia interista. De hecho fue él el que le puso la asistencia, después de mostrar nuevamente el mal momento de Grygera, a Thiago Motta, para que el brasileño la elevase por encima de Buffon. Un gol que sirvió para despertar a la Juve, hasta entonces perdida, trabajando muy mal el fuera de juego en la línea defensiva e improductiva por las bandas con el sistema que probó Ferrara ocupándolas con Iaquinta y Salihamidzic con Tiago detrás de Amauri. La Juve le metió otra velocidad al partido y empezó a entrar directamente en el área, buscando por el centro a Iaquinta y Amauri. Precisamente al italobrasileño le hizo un penalti Materazzi en una de sus llegadadas para intentar aprovechar un centro. Un penalti que después fallaría Iaquinta (genial Julio César), pero que cambiaría por completo el partido: Materazzi, como de costumbre, dijo alguna palabra que sobraba y terminó expulsado. Mourinho decidió ahí defender el resultado dando entrada a Rivas por Quaresma. Un cambio desafortunado porque el colombiano, en su primer partido del verano, que evidenció estar muy lejos de su mejor momento de forma (física, técnica y táctica) y que terminó regalando el gol del empate a la Juve con un infeliz pase atrás a Samuel que terminó dejando a Amauri solo ante Julio César. Amauri no falló y un minuto después el árbitro decretó el final y la consecuente tanda de penaltis: falló primero Poulsen (al palo), después Samuel (aún están buscando ese balón) y finalmente fue Buffon el que paró un penalti no demasiado bien tirado por Santo para certificar la primera victoria de Ferrara contra Mourinho.
Juventus - Milan, 2-0
Juventus (4-3-1-2): Manninger; Cáceres, Legrottaglie, Chiellini, Salihamidzic; Poulsen (28’ De Ceglie), Felipe Melo, Marrone; Yago; Iaquinta (43’ G. Giovinco), Amauri (34’ Im­mobile). A disposición: Chimenti, Buffon, Grygera, Molinaro, Cannavaro, Ariaudo, DePaola, Tia­go Alcibiade. Entrenador: Ciro Ferrara.
Milan (4-3-1-2): Roma; Oddo, Nesta (13’ Onyewu), Favalli, Antonini; Abate, Gattuso (20’ Ikande), Flamini; Ronaldinho; Pato (24’ Zigoni), Huntelaar (13’ Inzaghi). A disposición: Sto­rari, Kaladze, Borriello, Strasser, Oduamadi, Albertazzi, Scampini, Verdi. Entrneador: Leonardo Araujo.
Árbitro: Russo. Amonestó a Legrottaglie.
Goles: 14’ Amauri, 33’ Iaquinta.

Si el partido contra el Inter había sido un vaivén de emociones, el segundo cotnra el Milan ni siquiera pudo calificarse de disputa. Mejor la Juventus, quizá ayudada por el poco nivel exhibido por el rival, con el ya habitual 4-3-1-2 de Ferrara aderezado con una grandiosa novedad: la titularidad del español Yago Falqué por detrás de Iaquinta y Amauari. La promesa del Barça, cuyo talento no estuvo valorado por los técnicos catalanes, se está convirtiendo poco a poco en una realidad juventina: el año pasado marcó trece goles en el campeonato Primavera y este año ya ha jugado dos partidos con el primer equipo. Ayer, como titular, demostró la calidad que garantiza un canterano del Barça, que poco a poco consigue ganarse el calificativo de ser la cantera europea que antes fuese el Ajax. De hecho, salió de las piernas de Yago la pelota que después metería entre los palos Amauri para inaugurar el marcador de un partido que desde el principio parecía decantado a favor de la Juve, que mostró un juego efectivo, atractivo y muy convincente.

Ese gol (poco importa la ayudita de Roma, el último fichaje del Milan) terminó por desnivelar un partido que realmente nunca nació. El Milan, que ayer sumó la séptima y octava derrota de la pretemporada, se mostró incapaz de crear una sola ocasión de gol en todo el torneo, con unas bandas que le perjudican más de lo que le aportan, con Pato jugando de manera intermitente, con un Ronaldinho desaparecido que salió entre pitos y con Huntelaar perdido entre la nula productividad de su equipo. Además, Leonardo se encargó de hacer salir a varios jóvenes intentando quitarle importancia al torneo y sacándose alguna responsabilidad de encima. Con este panorama, era la Juventus la única que se acercaba a puerta hasta que llegó el 2-0 de Iaquinta (en fuera de juego), aprovechando una gran incursión de De Ceglie en su debut en esta pretemporada. Fue el gol que cerró el partido y dio el trofeo más prestigioso del verano a la Juve por primera vez en sus nueve año de existencia. El equipo aún tiene fallos; Molinaro y Grygera están pasando por dos momentos peculiares y no rinden; Melo partió con retraso y su falta de físico se nota. Pero por otra parte, la Juve ganó su primer TIM sin Del Piero, Trezeguet o Diego. Por comentar algunas cosas.



viernes, 14 de agosto de 2009

Una 'Fiera' para completar el gran circo


El rumor saltaba ayer en el diario Marca y hoy cobra credibilidad y relevancia en la prensa italiana: además de fijarse en Clerc y De Silvestri para suplir una eventual baja de Grygera (el Fenerbahçe lo quiere y la Juve está más que dispuesta a vender), Secco y Blanc tienen anotado en la agenda el nombre de otro crack: Maxi Rodríguez, que cumple una de las condiciones favoritas de la dirección deportiva de la Juve como es la de tener menos de doce meses de contrato en vigor. Además la situción de Maxi con el Atlético, más allá de la contractual, le ofrece otras ventajas a la Juventus: la relación del argentino con el Atlético pasa por su peor momento después de que el club haya intentado venderle por todos los medios este verano y de que a estas alturas no le haya ofrecido aún la renovación de contrato. Si fuese poco, el nuevo entrenador del Atlético, Abel Resino, le ha apartado de la capitanía para esta temporada y poco a poco va perdiendo incidencia en el equipo; tanto que en el Manzanares están dispuestos a que no juegue la previa de la Champions contra el Panathinaikos con tal de no arruinar las posibilidades de traspasarlo a otro top club europeo.

De puertas hacía afuera la noticia se encuentra con la negativa de todos: Blanc, al igual que John Elkann, ha declarado que el mercado de la Juventus "está cerrado", mientras que José Seguí, el representante del jugador, ha negado cualquier contacto y ha declarado que se reunirán con el Atlético "en las próximas semanas, tras el cierre del mercado". Pero lo cierto es que el interés es real y que la Juve prefiere gastar ahora algún millón (entre 6 y 7 podría estar el precio de 'La Fiera') y ponerle la guinda a una plantilla de lujo que le equipararía a los más grandes de Europa. Aunque desde el club se niega, la Juve aún mantiene la esperanza de vender a Poulsen y entonces poder fichar sin dañar más las cuentas de la temporada, que ya están en rojo, al argentino. Sin embargo, todas las afirmaciones apuntan a que, con Poulsen o sin él, la Juve intentará la contratación del jugador de veintiocho años en las próximas fechas (será clave el próximo martes, en el que jugando o no la previa de la Champions en Grecia se mandará un mensaje sobre su futuro en un sentido u otro) .

Con su llegada, la Juve completaría un centro del campo que ha quedado diezmado tras la marcha de Zanetti a la Fiorentina y con Salihamidzic en la nueva demarcación de lateral. Además, hay que recordar, que Poulsen, si finalmente se queda, no cuenta con el favor de los técnicos y que Sissoko estará aún un mes de baja y que no aparecerá hasta finales de septiembre o incluso principios de octubre (si no es más, puesto que en las últimas horas algunas informaciones apuntan a una nueva cirugía en el pie derecho del malí). Para un equipo que aspira a todo, a jugar más de cincuenta partidos en una temporada compactada por el Mundial de julio, las ausencias en el centro pueden pagarse demasiado caras. Y ahí Maxi Rodríguez puede jugar un papel fundamental. Durante su carrera se ha desempeñado en cualquier función del medio: ha jugado como pivote, puesto que posee un gran físico y una fuerza y garra interminables; como volante por ambas bandas, aprovechando su calidad y potencia; y como mediapunta, donde saca el mejor partido a su disparo y oportunismo. Se adaptaría bien al 4-3-1-2 de Ferrara y aportaría además otras posibilidades tácticas en caso de necesidad. Dicen que las puertas de la Juve están cerradas, pero la realidad es que hace falta bien poco para realizar una llamada y que Maxi se convierta en el comodín ofensivo de la nueva Juve. En la 'Fiera' que complete el circo de los sueños de la afición.

lunes, 10 de agosto de 2009

La marcha de Zanetti y las declaraciones de Maradona


Además de la llegada de Marchisio a Coverciano para reunirse por primera vez, junto a Buffon, Cannavaro, Chiellini, Camoranesi y Iaquinta, con la selección mayor de Italia, las noticias que han estado de actualidad hoy en relación con la Juventus han sido dos: la marcha de Zanetti a la Fiorentina y las declaraciones o infravaloraciones de Maradona hacia el trabajo de Ferrara en la Juventus. Iremos en orden creciente, es decir, empezando por lo poco (o nada) importante. Esto es, comenzar destacando las declaraciones de Maradona en las que menospreciaba el juego de la Juve y el trabajo de su 'colega' Ferrara: "Están jugando un fútbol típicamente italiano: catenaccio defensivo y después le pasan el balón a Del Piero y él lo mueve". Resulta curioso y es bastante molesto que con excesiva frecuencia aparezca gente que ignora el proverbio hindú y hablan sin asegurarse de que lo que dicen es mejor que el silencio. Maradona, con el prestigio y la supuesta idoneidad que le otorgan su pasado como gran futbolista se ha permitido primero criticar la falta de profesionalidad de algunos futbolistas y ahora los sistemas tácticos o las elecciones de otros entrenadores, obviando que él estuvo primero suspendido por consumo de cocaína, que se tuvo que ir de varios clubes porque nadie le quería y que después, en la invención de un sistema defensivo sin centrales, en su segundo partido en el puesto que le regalaron de seleccionador argentino, encajó un 6-1 de lo más sonrojante en la historia futbolística de ese país. Como entrenador le contemplan dos victorias (4-0 a Venezuela y 1-0 a Colombia) y dos derrotas (6-1 ante Bolivia y 2-0 en Ecuador) al frente de la albiceleste. De momento su experiencia en los banquillos no le otorga el poder suficiente para cuestionar los métodos de Ferrara o los de Manuel Pellegrini, que con su trabajo, con dureza y dificultades, ha conseguido llegar a entrenar al Real Madrid después de haber sufrido y triunfado en banquillos de menor nivel.

Tampoco conviene dedicarle mucho más tiempo a Maradona, su trayectoria, primero como jugador y después en los banquillos sirven para describirle sin añadir nada más Lo que realmente importaba hoy era la marcha de Cristiano Zanetti a la Fiorentina. La noticia llegó ayer de forma sorprendente y hoy ha encontrado la oficialidad tras una negociación relámpago entre ambos clubes. Zanetti llega a la Fiorentina por algo más de dos millones para sustituir a Felipe Melo, nuevo fichaje de la Juve. La confusión que rodeaba la noticia y las críticas que empezaban a aflorar, han sido aplacadas a última hora del día con una rueda de prensa de Ferrara en la que detalló la situación de Zanetti: el jugador, que terminaba contrato el próximo junio, tenía sobre la mesa la opción de prolongar su contrato con la Juventus, donde no iba a ser titular seguramente, o la de aceptar la oferta de la Fiorentina. Y al final decidió volver al club con el que debutó en Serie A hace trece años.

Con su salida la Juventus consigue una plusvalía de dos millones y la venta que estaba en los planes de Blanc y Secco. Tenía que ser Poulsen, al final ha sido Zanetti. Una cuestión de oportunidad (el interés de la Fiorentina) y de posibilidad (las pocas que había de conseguir que Poulsen abandonase el equipo). Dicen que todo ha sido muy rápido. En pocos días llegó la oferta de la Fiorentina (de un millón de euros), el contacto con el jugador y la decisión de la Juve de aceptar que Zanetti era un jugador prescindible (si bien Ferrara pierde una pieza importante tanto técnica como tácticamente). La respuesta de la Juve fue una petición de 2'5 millones y al final se ha cerrado en un punto intermedio. En la decisión de renunciar a Cristiano, ha pesado la escasa 'fiabilidad' física que el jugador ha demostrado en los últimos años (además del final de su contrato a final de temporada): doce partidos pudo disputar el pasado campeonato, donde tuvo dos lesiones de gravedad y le impidieron mostrar las cualidades que sí se vieron hace dos años.

Como habíamos dicho, Zanetti se formó en la cantera de la Fiorentina, con la que debutó en 1995 de la mano de Claudio Ranieri. Allí jugó sólo cuatro partidos para fichar después por el Vicenza, la Reggiana, el Cagliari y finalmente por la Roma en 1999. Fue Fabio Capello quien admiró sus dotes y lo quiso en su equipo, a la postre campeón de un scudetto histórico, para formar pareja con Emerson en un centro del campo muy físico y eficaz. En 2001 se fue al Inter por una buena cantidad de millones (a pesar de la oposición de Capello) y a allí vivió cinco años marcados por la intermitencia provocada por los continuos problemas musculares. A pesar de todo, cuajó una muy buena temporada 2004/05, la primera de Mancini en el Inter.

Justamente desavenencias con el técnico le llevaron a no renovar su contrato con los neroazzurri un año después y quedar libre en 2006 para irse al equipo que él eligiese. Se decidió por la Juventus: Capello había contactado con él en la primavera y había llegado a un acuerdo para volver a tener a sus órdenes al pupilo que le arrebataron en la Roma y que quería volver a alinear al lado de Emerson. Sin embargo, el Calciopoli le jugó una mala pasada: Capello se fue y la Juve descendió a Serie B. Pero él había firmado un contrato y quiso respetarlo. Con Deschamps fue un hombre importante dentro del equipo, jugando veintiocho partidos y anotando dos goles. Pero fue la siguiente temporada, con Ranieri de nuevo entrenándole, la mejor de su carrera. Parecían quedar atrás sus problemas físicos y Zanetti jugó veintinueve partidos, siendo uno de los mejores del equipo, el único capaz de crear juego y mantener junto el equipo (tras los fichajes fallidos de Tiago y Almirón) y una pieza indispensable para la conquista del tercer puesto y la posterior clasificación para la Champions League. Sin embargo, en el verano en que renunció jugar con Italia para prepararse para la mejor temporada posible con una Juve que regresaba a Europa, se lesionó en un amistoso contra el Borussia Dortmund. De ahí regresó el catorce de diciembre contra el BATE Borisov, pero un mes más tarde, contra el Cagliari, volvería a lesionarse hasta abril. En total, sólo pudo disputar doce partidos la pasada campaña; una estadística que ha llevado a la Juventus a aceptar la oferta de la Fiorentina por él. Se va Cristiano y se queda Poulsen, un acierto económico, quizá un fallo deportivo. Para él sólo caben agradecimientos y dessearle lo mejor. Fue un jugador ejemplar dentro y fuera del campo y ha contribuido directamente en el crecimiento de la Juventus después del Calciopoli. Algo que no le ha servido para ganarse el calificativo de estrella, pero sí el respeto de todos.

sábado, 8 de agosto de 2009

Mazazo para despertar


Juventus - Villarreal, 1-4
Juventus (4-3-1-2)
: Manninger; Zebina (1' st Cáceres), Legrottaglie (36' st Ariaudo), Cannavaro, Molinaro (26' st Chiellini); Camoranesi (1' st Salihamidzic), Felipe Melo, (26' st Tiago) Marchisio (20' st Zanetti); Giovinco (40' st Yago); Del Piero, (1' st Amauri) Trezeguet (1' st Iaquinta). A disposición: Chimenti, Pinsoglio, Marrone. Entrenador: Ciro Ferrara.
Villarreal (4-4-2): Diego Lopez; Ángel, Godin (1' st Marcano), Gonzalo, Capdevila (1' st Javi Venta); Cani (16' st Escudero), Eguren (29' st Bruno), Ibagaza (16' st Fuster), Cazorla (1' st Pires); Rossi (1' st Pereira), Nilmar. A disposición: Oliva, Fuentes, Marcos Senna, Llorente. Entrenador: Ernesto Valverde.
Arbitro: Damato. Amonestó a Molinaro, Marchisio, Eguren y Godín.
Goles: 43' pt Cazorla, 6' st Nilmar, 32' st y 45' st Pires, 40' st Amauri.

Una derrota por 1-4 ante el público que te aclama siempre es dolorosa. Pero no es cuestión de llevarse las manos a la cabeza. La Juventus ha demostrado sus credenciales durante la primera parte de la pretemporada y ayer, entre el cansacio y la relajación, se llevó la desagradable e inaceptable sorpresa. Quizá sea mejor así. Obviamente todos prefieren ganar, pero una derrota a estas alturas puede venir bien para evitar que los elogios se suban a la cabeza y que la confianza no llegue después, jugándose el Scudetto o la Champions. Al final, queriendo ver el vaso medio lleno (no medio vacio, como debían estar las pilas de unos jugadores que terminarán la pretemporada con once partidos jugados en un mes; y no precisamente contra rivales de bajo nivel: Nancy, Vicenza, Sevilla, Real Madrid, Aston Villa, Villarreal y los próximos Milan e Inter), a la pretemporada juventina le faltaba sólo una cosa: una derrota. Que además es la primera bajo el mando de Ferrara.

Y que coincide con el peor partido que la Juventus ha jugado a sus órdenes ( contando los dos de la pasada temporada). No por el resultado, que también es el peor, sino por la actuación global del equipo: lentos e imprecisos con el balón, indolentes y fuera de sitio sin él. Que Felipe Melo es una de las claves en el esquema de Ferrara es algo que ya hemos podido comprobar. Pero ayer también corroboramos que también lo es para mal: si él falla, el equipo lo pasa muy mal. Ayer perdió muchísimos balones que permitieron las contras rivales y pusieron en apuros a la pareja inédita de la defensa bianconera: Cannavaro y Legrottaglie juntos por primera vez después de que hace un par de días, el ex del Chievo declarase que pensó en marcharse cuando la Juve anunció el fichaje de Cannavaro. Desde la televisión se podían oir los gritos de Ferrara desde la banda, que coincidían con cualquier aficionado que estuviese viendo el partido: "¡Felipe tienes que estar más atento y pasar rápido el balón!". Marchisio, por su parte, estuvo tan intermitente que parecía no estar y Camoranesi... día libre demasiado indecoroso hacia una afición volcada que llenó el estadio. Arriba las cosas no iban mejor. Era el resultado de todo lo que pasaba por detrás. A Giovinco no le llegaban buenos balones y cuando lo tenía se encontró incapaz de pensar ante la presión de las dos líneas amarillas.

Aunque seguramente, el parrafo anterior se podía ahorrar diciendo dos cosas: Manninger fue quizá el mejor de la Juve y encajó cuatro goles. El dato habla por sí sólo. El submarino del Villarreal emergió rápidamente y empezó a bombardear con los misiles de Rossi, Nilmar y Cazorla el paredón en el que se había convertido el arco del austriaco. Su primer gol fue una obra de arte merecida de Santi Cazorla, que volvía a jugar un partido de titular tras lesionarse el pasado invierno: minuto 43, pérdida de balón de Del Piero, regate sobre Melo para terminar sacando un zurdazo imposible de atajar para Manninger. Ferrara buscó la reacción del equipo con cuatro cambios en la reanudación (Cáceres, que debutaba, Salihamidzic, Amauri y Iaquinta por Zebina, Camoranesi, Del Piero y Trezeguet). Se notó la reacción y la frescura, pero rápidamente Nilmar mostró por qué él es el fichaje más caro de la historia del Villarreal: paradón de Manninger después de que Cannavaro no pudiese parar a Jonathan Pereira, pero el rechace le cae al brasileño que marca a puerta vacía. El 0-2 parecía acontentar ya a los castellonenses, pero aún tuvieron tiempo de que Pires en el 60 y en el 90 marcase un par más y dejara sin ningún valor el gol que había marcado Amauri unos minutos antes. Debutó Yago, por cierto, y al final del encuentro los ánimos cambiaron y donde habían coros y aplausos aparecieron los pitos. De todos modos, "mejor ahora que más adelante". Toca trabajar para que así sea.

Puedes ver el resumen del partido en Curva Bianconera TV.

martes, 4 de agosto de 2009

El positivismo recupera a Zebina, Tiago y Camoranesi


Con más de la mitad de la pretemporada cumplida, y antes de entrar en la cuesta de agosto en la que se ha convertido la pretemporada de la Juve (Villarreal, Trofeo Tim ante Milan e Inter y Trofeo Berlusconi antes el Inter), es hora de ponerle nota, tomando como base principal las sensaciones, el único calificable en verano, a la actuación del equipo. El ligero despertar, más en lo anímico que en lo táctico-técnico, que se vio en las dos últimas jornadas de la pasada campaña, se ha confirmado y aumentado, rodeando al equipo de un ambiente optimista que no se vivía en la Juventus desde hacía muchos años, más allá de la anomalía que ha supuesto el comienzo de un año sin la melena rubia de Nedved girando sobre los campos de Pinzolo.

El equipo se está amoldando al nuevo 4-3-1-2 que anunció Ferrara en su presentación y que no se puso en práctica hasta el debut contra la Cisco Roma, y el cambio de piel está siendo a todas luces satisfactorio. El nuevo sistema y el carácter abierto de Ferrara, han conseguido mostrar, al fin, al Tiago por el que la Juve pagó trece millones de euros hace dos veranos, con continuidad, previendo su asentamiento total en el equipo, al que le dará una ayuda importantísima en una temporada que se presenta llena de grandes retos e iguales obstáculos. El futuro más inmediato queda plagado de dudas, pero siempre agradables: ¿Qué pasará cuando estén disponibles al 100% Sissoko y Diego? ¿Y cuando Felipe Melo se acople del todo al equipo? ¿Y cuando vuelvan a la circulación habitual De Ceglie y Molinaro, los dos laterales que Ferrara ha confirmado desechando la posibilidad de incorporar otro? ¿Y cuando Cáceres esté integrado en el funcionamiento del grupo? Las impresiones de la pretemporada son buenas: Ferrara ha conseguido rescatar, además de a Tiago, a Zebina y Camoranesi; el sistema funciona y el equipo sigue con la mentalidad ganadora. Aún así, lo mejor parece que está por llegar.


Buffon: 7
Poco que destacar de él. Para la Juventus es y seguirá siendo el mejor del mundo, y poco a poco, lo va demostrando. Algún desajuste defensivo (como en el gol contra el Vicenza), algún error en la medida de las distancias, algún despiste o fallo se pueden permitir en pretemporada, y más cuando hay un cambio de sistema tan importante. Pero en la Peace Cup ya dio muestras de concentración total, exponiendo sus reflejos y su sentido organizativo al servicio de la defensa. Sin duda, está preparado para vivir una gran temporada, alejado de rumores y lesiones.

Manninger: 7
Impecable e implacable, al igual que lo hizo durante toda la temporada pasada, cuando tuvo que suplir a Buffon y jugar, entre otros estadios, en el Bernabéu. Con su sobriedad, pasa el exámen con nota y queda la sensación de que ya tiene su hueco en el vestuario. Cuando juega se hace respetar por los compañeros y también por los rivales. Sabe que este año tendrá un papel secundario, pero estará ahí para asegurar a la Juventus en caso de ausencia de Buffon.

Zebina: 7
Uno de los más beneficiados, sin duda, de la llegada de Ferrara. Desde el primer día decidió apostar por él y, aunque sorprendente, el rendimiento ha terminado por darle la razón al técnico también con Zebina. El 4-3-1-2 requiere de laterales que sepan subir bien arriba, pero sin descuidar la defensa, y Zebina está cumpliendo con esos requisitos. Ha ido de menos a más durante el verano y puede terminar siendo una de las sorpresas de la temporada si mentalmente logra centrarse y abandona definitivamente el juego sucio.

Grygera: 6
Correcto, sin más. Sabe que ha perdido el trato de favor de Ranieri y que empieza con desventaja en la carrea con Zebina por hacerse con el puesto en el lateral derecho de la defensa. Está nervioso y se le nota. Sus actuaciones se han resentido ha figurado entre los transferibles y se le ve algo desganado. No da las muestras suficientes de querer ser el titular y luchar por el puesto. Y cuando lucha, se pasa (como hizo en la entrada super agresiva a Ronaldo).

Cannavaro: 7
El capitán de la Nazionale empieza a callar a sus críticos, retomando el mando de la defensa que abandonó hace tres años. Tras las protestas sobre su vuelta a Turín y las críticas posteriores a la Copa Confederaciones, está cargado de garra y tiene unas ganas locas de ganar y volver a conquistar al público. Además de hacerlo bien en la defensa, consiguió marcar ante el Madrid (hizo cinco goles en su última temporada en la Juve). Estará todo el año bajo lupa, pero puede convertirse en un gran fichaje.

Chiellini: 6
Seguramente sea uno de los defensas centrales que menos han destacado en el aspecto positivo. Se le ha visto algo lento y superado. Pero no existe motivo para la preocupación; es un central eminentemente físico, y conseguirá su mejor forma dentro de unas semanas. También hay que recordar que entró más tarde en la dinámica del equipo y que acabó la Confederaciones con unas pequeñas molestias.

Legrottaglie: 6'5
Empezó la temporada más tarde que el resto (exceptuando a Giovinco) por permiso especial del club. Sus primeros entrenamientos con el resto de los compañeros fueron en España y en los partidos que jugó no dio muestras de faltarle nada a estas alturas de la película. Se espera un gran año en la Juve y él quiere formar parte importante de él. No hará regalos ni concesiones, y si Cannavaro o Cáceres quieren un puesto, tendrán que superarle.

Molinaro: 6
Seguramente sólo se pueda utilizar el carácter como único parámetro evaluable en su caso. Ha vuelto al fútbol antes de lo esperado tras superar esas extrañas manchas en la zona renal y después de cuarenta días sin poder moverse. El miedo a dejado paso a la felicidad y la esperanza. Debutó contra el Nancy en el homenaje al Joeuf y fue titular contra el Villa en la final de la Peace Cup. Es la primera elección de Ferrara para el lateral zurdo y sólo queda esperar que retome la marcha y que la lesión sufrida en el tobillo derecha en la final de Sevilla no le dificulte más las cosas.

Salihamidzic: 7'5
En ausencia de Molinaro y De Ceglie (que arrastra la lesión que sufrió en el Europeo Sub 20), ha sido él, el comodín del equipo, el nuevo lateral izquierdo de Ciro Ferrara. Y ahí ha conseguido ser una de las sorpresas de la pretemporada por rendimiento y continuidad. Jugando en el perfil contrario al suyo hizo grandes partidos contra el Nancy y el Seongnam y su mejor actuación fue, contra quién si no, contra el Real Madrid. Dio mucha amplitud a la banda izquierda, anuló a Ronaldo y consiguió marcar. Brazzo siempre es importante.

Zanetti: 7
Perfecto. Sin problemas físicos ha vuelto a ser el Cristiano de hace dos temporadas, cuando se ganó el puesto de titular en contra de todos los pronósticos. No quiere ser un convidado de piedra en el centro y dará batalla para conseguir la titularidad aprovechando sus carácteristicas que le hacen destacar tanto en la recuperación como en la distribución. En estos partidos ya nos ha dejado alguno de esos pases de 30 metros perfectos al pie de Del Piero. Siempre sobrio, aportando calidad y trabajo, sin fallar nunca.

Melo: 6'5
Adelantó el final de sus vacaciones para encontrarse rápido con su nuevo equipo, y eso nos puede ayudar una medida de cuán importante es para él esta nueva aventura. No ha necesitado ningún periodo de adaptación y rápida y sorprendentemente ha tomado el control de la sala de máquinas. Ya ha dejado muestras de sus cualidades organizativas, variedad de recursos y pase y de recuperación. Lleva retraso en cuanto a la preparación física y eso, de momento, le penaliza. Tiene que controlar su furia para no repetir las trece amarillas y dos rojas que vio la pasada temporada, pero Felipe parece uno de esos futbolistas nacidos con la misión de jugar y triunfar en la Juventus.

Marchisio: 6'5
Esta temporada, y está empezando a hacerlo en la pre, es la de su confirmación al más alto nivel futbolístico mundial. Su calidad no nos permite hablar de él como una mera alternativa, sino como uno de los mejores italianos de futuro y un hombre importante en la Juventus actual y del futuro. La competencia no le asusta, todo lo contrario: en el campo se ha mostrado autoritario, aprovechando de la mejor manera posible sus carácteristicas. Ferrara cuenta mucho con él y Marchisio está devolviendo la confianza con los grandes partidos que el físico, aún precario, le permite.

Tiago: 7'5
¿Será esta la temporada en que la Juventus finalmente fiche al verdadero Tiago? Ahora mismo la respuesta es sí. Al igual que hizo con Zebina, Ferrara se marcó el objetivo de recuperar a Tiago para el gran fútbol y está encaminado a conseguirlo. El 4-3-1-2 le otorga más referencias que el 4-4-2 de Ranieri y se siente mucho más cómodo. Además, nota el apoyo del técnico y eso le ha hecho crecer hasta volver a ser él. En el verano del optimismo su rescate ha sido uno de los desencadenantes del buen ambiente. Con el verdadero Tiago, la Juve completa un centro del campo de auténtico lujo. Quién sabe si él también termina siendo un 'colpo di mercato'...

Camoranesi: 7
Llegó junto a los confederados más tarde que el resto, pero eso no ha supuesto ningún problema para él. Su actitud es radicalmente distinta y está dispuesto a volver a ser el jugador determinante que fue. El Camoranesi anodino y desequilibrado ha dado paso uno más centrado y que pone su extenso arsenal de recursos a disposición del equipo. Ha sido el mejor socio de Del Piero y lo fue también de Diego contra el Seongnam. Calidad, garra y carácter al servicio de Ferrara. Aunque el espíritu de samurai necesite más control.

Diego: 7
Un relámpago de la clase más pura que puede existir. Eso es lo que pudimos ver en los 60 minutos que jugó contra el Seongnam. Massimo Neri sigue trabajando en él y explicó que posee una musculatura que requiere un tratamiento especial; nada preocupante. Su sola presencia hace soñar a todos los juventinos y se espera que sea él la rotura definitiva que haga olvidar todos los problemas del pasado. Se hace esperar, pero se disfrutará más todavía.

Giovinco: 6
La llegada de Ferrara también ha mejorado su posición dentro del equipo, del que ahora es parte más importante. Junto a Legrottaglie fue el último en llegar y se nota. Aún así ha cubierto el papel de titular con convicción en los dos últimos partidos, aunque en ocasiones paga cara la superidad física de los rivales. Contra los coreanos dio una exhibición recogiendo el testigo de Diego y ese tiene que ser su punto de partida. Está ante una de las temporadas más importantes de su carrera.

Del Piero: 7'5
Magnífico. Como siempre, por otra parte. Su compenetración con Ferrara, con el que le une una gran amistad personal, le ha convertido en la extensión del entrenador en el campo; se ha hechado el equipo a la espalda y lo está conduciendo como un verdadero capitán, dejando destellos de verdadera clase. Durante parte del verano ha tenido que sacrificarse para jugar de mediapunta, pero su rendimiento ha sido igualmente alto. La renovación de su contrato hasta 2011 puede ser el preámbulo de una temporada verdaderamente emocionante.

Iaquinta: 7
Ha llamado ya a las puertas de la titularidad dos veces mediante dos goles. Vincenzo siempre ha sido así; sin decir nada y casi sin que los demás se den cuenta, va adentrándose en el equipo inicial. Durante los minutos que coincidió con Diego contra el Seongnam se pudo intuir una sociedad asombrosa entre el brasileño y Iaquinta por la capacidad milmétrica del pase de uno y la velocidad y la búsqueda y creación de espacios del otro, que sigue siendo el delantero solidario, trabajador, rápido y fiable que cualquier entrenador querría tener y que no se puede dejar de lado.

Amauri: 6'5
Por una expulsión que nunca tuvo que ocurrir (por ninguna de las partes) en un partido amistoso no se puede juzgar a un jugador de su categoría, que se hace a sí mismo cada día. Hizo mal al equipo contra el Vicenza, pero ante Cisco, Nancy y Sevilla fue de los mejores. Es el objetivo del juego de Ferrara y este año se espera mucho de él. Contra el Sevilla mostró todo lo que de él se puede esperar, ganando todos los balones aéreos, marcando un gol, y teniendo junta la línea ofensiva. Cuando llegue al tono físico idoneo volverá a ser el delabtero debastante del inicio de la temporada pasada.

Trezeguet: 5'5
Se ha reencontrado con el gol, pero las muchas dudas que habían sembradas alrededor de su futuro le pasaron factura. Se reencontró con el gol marcando dos (Cisco y Vicenza), pero ha fallado al menos el triple. Ha sido la nota menos positiva de la pretemporada y suu juego parece ha ido transcurriendo por un camino distinto al del resto del equipo. El carpetazo que él mismo dio a los rumores que le situaban fuera del equipo le debe devolver la calma y la serenidad. La confianza de Ferrara la tiene y puede terminar convirtiéndose en un valor añadido para este equipo.

lunes, 3 de agosto de 2009

Los penaltis cobraron caros los errores


Juventus-Aston Villa, 0-0 (3-4 p)
Juventus (4-3-1-2): Buffon; Zebina, Chiellini, Legrottaglie, Molinaro (40' pt Grygera); Camoranesi (45' st Del Piero), Melo, Marchisio (11' st Zanetti); Giovinco (1' sts Amauri); Iaquinta, Trezeguet. A disposición: Manninger, Chimenti, Cannavaro, Ariaudo, Salihamidzic, Tiago, Marrone, Immobile. Entrenador: Ciro Ferrara
Aston Villa (4-4-2)
: Guzan; Lichaj, Cuéllar, Davies, Shorey (29' st Lowry); Albrighton, Reo-Coker, Sidwell, Young; Weimann (29' st Bannan), Carew (1' pts Herd). A disposición: Parish, Hofbauer, Collins, G.Gardner. Entrenador: Martin O'Neill.
Árbitro:
Bloom (HOL). Amonestó a Melo, Zanetti, Sidwell y Lichaj.
Penaltis: Bannan gol; Iaquinta parado; Sidwell alto; Trezeguet gol; Lowry gol; Amauri gol; Young gol; Melo gol; Herd parado; Del Piero parado; Cuéllar gol; Legrottaglie parado.

La loteria de los penaltis del partido de ayer (decretada por el árbitro cuatro minutos antes de tiempo y sin recibir demasiadas quejas por ello) premió al Aston Villa con dos millones de euros y la mitad, un millón para la Juventus, que salió perdedora, pero que igualmente se lleva una buena cifra económica y la tranquilidad de quien ha demostrado su valor, habiendo derrotado a Sevilla y Real Madrid, creciendo partido a partido, mostrando un buen fondo, ideas y estructuras técnicas que inspiran optimismo entre una afición que estaba muy necesitada de él. Hay que recalcar, que el partido de ayer estuvo marcado por la fatiga desde el primer minuto y estropeado por lo mismo a la altura de la hora y poco de juego. Porque cuatro partidos en nueve días, dejan huella (siempre negativa). Para reparar daños, Ferrara dispuso cinco novedades sobre el campo con respecto al equipo que ganó al Madrid: Zebina, Legrottaglie, Molinaro, Marchisio, Iaquinta y Trezeguet por Grygera, Cannavaro, Salihamidzic, Tiago, Del Piero y Amauri. Una decisión tan necesaria como arriesgada y que al final se terminó pagando: sin Del Piero, da igual la edad que tenga, la Juve sigue sufriendo. Porque ayer falló la definición de Iaquinta y Trezeguet y la organización y el sentido que le da Alex al juego.

Aunque la Juve empezó bien, y lo hizo precisamente con un disparo de Giovinco en el minuto 1 y otro de Melo, que se perdió por centímetros por encima del arco villano; dejándose guiar por un Camoranesi recuperado para el buen fútbol, con las lesiones y los malos entendidos apartados. El Aston Villa, por su parte, lleno de los jóvenes que le han llevado al triunfo final extrajo el máximo potencial de Young en punta y dos de las revelaciones del torneo, Lichaj y Albrighton, que por la derecha condenaron a Molinaro a abandonar el campo a causa de una mal apoyo con el pie derecho a los 40 minutos. Los villanos se centraron en la contra, obligando a la Juventus a tener el balón, que sabe hacerlo. Fue Melo el eje del equipo, pero su gasolina no duró más de la media parte (aunque incluso tiró un penalti) y los errores en la recuperación y en la distribución del brasileño eran evidentes; no encontraba a Giovinco y al final el juego del equipo terminó llegando sólamente por la derecha, con los movimientos continuos de Camoranesi y las subidas de un Zebina que estuvo genial. Igual que Buffon: a los 38 tuvo que hacer un paradón a Carew, pero lo que hizo tres minutos después, con una internada de Albrighton, que intentó fusilar desde cerca, mostró todo el poderío del número uno del mundo.

En la segunda parte, el cansancio y las cometidas continuas del Villa (que empieza la Premier en menos de dos semanas y está mucho más rodado que la Juve) hicieron que Ciro Ferrara cambiase a Marchisio, fundido, y diese entrada en su lugar a Zanetti, con una pequeña variación táctica: 4-2-3-1 con Melo (no menos cansado que Marchisio) y el propio Zanetti en el centro y Iaquinta, Camoranesi y Giovinco por detrás de Trezeguet, dando una libertad que creó problemas a los de Martin O'Neill, que fue rejuveneciendo poco a poco su equipo. Y terminó por pasarle factura, porque las ocasiones de la Juventus llegaron una tras otra: Trezeguet, asistido por Zebina, remató al cielo sevillano en el 62'; dos consecutivas de Iaquinta, una de cabeza y otra con un disparo lejano (66' y 68') y una posterior de Trezeguet en el 72', que no supo aprovechar un regalo de Cuéllar. Como admitió después ante la prensa, se había reunido con Secco para aclarar su futuro, que seguirá ligado a la Juventus. Quizá estaba pensando en otras cosas durante el encuentro. Si bien, él no falló su penalti. Lo hicieron Iaquinta (definitivamente, la de ayer no fue su noche), Del Piero y Legrottaglie. La Juve vuelve a casa sin la Copa, pero con motivos para ser optimistas: con el acople definitivo de los nuevos, la recuperación de Sissoko y la vuelta de los verdaderos Zebina, Camoranesi y Tiago, unido a la llegada de Cáceres, este equipo no puede hacer otra cosa que seguir creciendo.

Puedes ver el resumen del partido en Curva Bianconera TV.

Twitter Delicious Facebook Digg Stumbleupon Favorites More